Este año tampoco habrá Champions League para Neymar. La joya del PSG tendrá que volver a conformarse con la fácil Ligue 1 como ya pasó el curso pasado. El brasileño se fue de Barcelona con el objetivo de levantar la orejona y coronarse como el mejor jugador del planeta. Pero esta temporada no ocurrirá. Este miércoles fueron eliminados en octavos de final.
El extremo se lesionó del tobillo -entre llantos- a finales de enero y el club anunció que estaría 10 semanas de baja. Se perdía la eliminatoria de competición europea y todos los parisinos confiaban en el joven Kylian Mbappé. Un jugador que, pese a ganar el Mundial de Rusia con Francia, no ha podido llevar a su equipo a cuartos.
Polémica recuperación
Neymar y polémica van cogidos de la mano. Primero fue la celebración de su cumpleaños. Alquiló un edificio en les Champs-Elysées e hizo una macrofiesta con más de 500 invitados. Él apareció con silla de ruedas y muletas, una manera de recuperarse que dudamos que le hiciera mucha gracia a Nasser Al-Khelaifi.
Neymar Júnior en el Carnaval de Río de Janeiro / Instagram
No termina aquí. En vez de quedarse con el equipo y el cuerpo médico del PSG pidió permiso al club para seguir su recuperación en Brasil. Como no, se le pudo ver presenciando los famosos desfiles de Carnaval de Río de Janeiro. Llegó a tiempo este miércoles para estar en el palco de Parc des Princes presenciando la eliminación de su equipo y se mostró indignado con la decisión del árbitro.
Ejemplo de mal líder
El extremo vio en directo la mano de su compañero Kimpembe contra el Manchester United que significó penalti. Una pena máxima que sería transformada por Marcus Rashford. En ese momento explotó. Se le vio indignado con la decisión arbitral del VAR. “Es una vergüenza”, exclamaba.
Instagram Stories de Neymar Júnior el miércoles por la noche / Instagram
“Ponen a cuatro hombres que no entienden de fútbol para que vean el lanzamiento -en cámara lenta- y eso no existe. ¿Cómo va a poner la mano en la espalda?”, decía en redes sociales. Neymar vivió sobre el césped la eliminación de su equipo ya que bajó del palco para estar junto de sus compañeros.
Su actitud no ha sido buena, dice poco de él. No ha apoyado al equipo. Ha estado estas semanas alejado de la rutina de sus compañeros, pensando en la mejor manera de pasar el difícil momento de la recuperación. Como le pasó a Sergio Ramos el martes, los dos se quedaron impotentes viendo como su equipo se despedía de la competición más prestigiosa antes de lo previsto.