No son días fáciles para Neymar Jr. Tras la eliminación bochornosa que sufrió el Paris Saint-Germain en Champions League contra el Real Madrid, los aficionados parisinos están pagando los platos rotos con dos principales señalados: Neymar Jr y Leo Messi. Y, curiosamente, salvan de la quema al único jugador que posiblemente les traicione a final de temporada para irse al conjunto blanco: Kylian Mbappé.
Desconexión en Barcelona
La cuestión es que Neymar siempre ha sido un enamorado de la ciudad de Barcelona, y aprovechó los últimos días libres para visitar la capital catalana y desconectar un poco de toda la presión que ha sufrido recientemente. De esta forma, entre amigos y familia, ha intentado pasar página de la que seguramente haya sido una de sus peores semanas como futbolista, sobre todo desde que llegó al PSG.
Este martes por la mañana, Neymar Jr fue visto en el aeropuerto de Barcelona cuando iba a coger su avión de regreso a París. El brasileño ha podido pasar tiempo para estar con su hijo, y a la hora de coger el vuelo de vuelta no ha dejado indiferente a nadie con su peculiar forma de vestir, como ya es habitual en él. Podría entenderse, eso sí, como una especie de camuflaje para evitar ser identificado.
Puede hacer las maletas
Tras el nuevo fracaso europeo del PSG en Champions League, se especula con que Neymar Jr sea la principal venta del equipo galo este próximo verano, con el objetivo de reconstruirse en el frente de ataque. El conjunto dirigido por Mauricio Pocchetino vuelve este martes a los entrenamientos, a fin de preparar el final de una temporada en la que ya no tiene alicientes, más allá de sellar la conquista definitiva de la Ligue 1.
Neymar Jr llama la atención antes de coger el vuelo de Barcelona a París / Redes
Neymar Jr llama la atención antes de coger el vuelo de Barcelona a París / Redes
Si Neymar Jr hace las maletas del PSG a final de curso y también lo hace Leo Messi (algunas voces dicen que quiere volver al Barça), en un verano el proyecto faraónico del club francés podría quedar en ruinas, teniendo en cuenta la salida inminente de un Mbappé que ya habría llegado a un acuerdo con el Real Madrid.
Los parisinos deberán reconstruirse prácticamente desde cero, y puede que apuesten por fichajes con más sentido, a partir de ahora, para crecer como equipo y hacerse con jóvenes talentos que puedan crecer en el PSG. Sea lo que sea, lo que ya es un hecho es que Al-Khelaifi y compañía, tras diez años sin conseguir la Champions League, están protagonizado uno de los mayores ridículos en la historia del fútbol.