Agüero descartó la casa maldita de Cesc tras el adiós de Messi a Castelldefels

El adiós de Leo Messi ha comportado muchos daños colaterales en el FC Barcelona. Con grandes incógnitas todavía por resolver, cómo el verdadero motivo por el que Laporta no pudo/quiso encajar al 10 en la nueva estructura salarial --ha quedado acreditada la inflación de pérdidas por valor de 481 millones de euros que podría haberse evitado-- o las razones que llevan a buscar un aval independiente de terceros, como es el caso del empresario Jaume Roures, la realidad es que Leo Messi ya marca goles con la camiseta del PSG. Mientras tanto, el ya renovado Ansu Fati luce, para gozo de la parroquia barcelonista, el dorsal que tantos años llevó en su espalda el astro argentino. El reto pasa por conseguir nuevos ingresos comerciales sin el poder de la marca Messi unida a la marca Barça, al tiempo que se debe intentar construir una plantilla más competitiva limitada por la Liga a unos salarios de solo 97 millones de euros. Uno de los que ha llegado para reforzar esta plantilla es Sergio Agüero, otro de los que ha sufrido esos daños colaterales. 

Rechazó Castelldefels por Messi 

El Kun, fichado por Laporta para contentar a Messi y ofrecerle más argumentos para que se quedase en el Camp Nou, se quedó perplejo cuando supo que Leo marchaba del Barça. En Argentina comentaron que estaba del todo indignado y, aunque luego lo desmintió, se filtró que había solicitado salir del club antes de poder debutar. Hay que recordar que Agüero se fue del Manchester City y recaló en Barcelona para cobrar un salario bastante inferior al que percibía en Inglaterra. Una realidad que, por otra parte, era acorde a su bajón de rendimiento por las lesiones. 

El jardín interior de una de las mansiones de Leo Messi en Castelldefels / REDES

El jardín interior de la casa de Leo Messi en Castelldefels / REDES

Esa reducción salarial, y especialmente el adiós de Messi, explican una de las decisiones del Kun sobre su vida en Barcelona. Según ha podido saber Culemanía, el delantero argentino rechazó la posibilidad de vivir en Castelldefels, muy cerca de su amigo. En un principio esa era la idea y se puso sobre la mesa la posibilidad de vivir en la casa de Cesc Fàbregas, a cinco minutos en coche de la casa de Leo. Todo cambió cuando se confirmó la salida del astro argentino rumbo al PSG. 

Le ofrecieron casas en Gavà Mar

Agüero ha optado finalmente por instalarse en un lujoso apartamento en Barcelona. Se trata de un piso de unos 500 metros cuadrados en la zona alta de la capital catalana, más próxima al Camp Nou y la Ciutat Esportiva. Aunque en un primer momento estuvo mirando casas, y le ofrecieron varias opciones en Gavà Mar, cerca de donde mantienen residencia varios argentinos como Mascherano, Riquelme o el padre de Messi, además de otros ilustres blaugranas como Víctor Valdés, Luis Enrique y Keita, el crack albiceleste estaba por la labor de instalarse en Castelldefels para estar más cerca de Messi. El problema es que buscaba una casa con terreno exterior que tampoco se fuese mucho de precio --ya saben, está en la etapa final de su carrera y ya se gastó mucho dinero en su mansión de Manchester-- y no encontró nada de su gusto. 

La casa de Víctor Valdés en Gavà Mar / CULEMANIA

La casa de Víctor Valdés en Gavà Mar / CULEMANIA

La opción que más le encajaba era la casa maldita de Cesc Fàbregas. Una propiedad que el de Arenys compró y reformó, llevando a cabo una inversión de cinco millones de euros, cuando aún jugaba en el Barça. Su sueño era quedarse en Barcelona, pero la cosa le salió mal. Posteriormente, Cesc alquiló esa casa a otros jugadores que pasaron por el club blaugrana. Curiosamente, todos ellos fracasaron. El primero fue Thomas Vermaelen, compañero de Cesc en el Arsenal. Impedido por las lesiones, no logró encajar y siempre quedará vinculado a la frase que dijo Andoni Zubizarreta, entonces director deportivo: "Es un fichaje de rendimiento inmediato". Nunca lo fue. 

'La casa de los horrores' 

Posteriormente, la casa de los horrores fue habitada por otro jugador que pasó su estancia de balugrana traumatizado: André Gomes. El medio portugués se instaló allí de alquiler pero las cosas no salieron como esperaba y a pesar de que Luis Enrique vaticinó que triunfaría en el Barça, acabó saliendo por la puerta trasera y reconocimiento síntomas próximos a la depresión, por la presión que le suponía jugar en el Camp Nou. El caso del luso tiene la agravante de que terminó mal con Cesc Fàbregas porque al parecer no dejó la casa igual de bien que se la habían entregado y tuvieron que dirimir algunas diferencias mediante sus asesores legales. 

La casa de Cesc Fàbregas en Castelldefels donde vive Philippe Coutinho / Culemanía

La casa de Cesc Fàbregas en Castelldefels donde vive Philippe Coutinho / Culemanía

El tercero en discordia que ocupó la citada torre es otro de los que se estrelló. Como en los casos de Cesc, Vermaelen y Gomes, a Philippe Coutinho también le quedó grande el Camp Nou. Sin embargo, el brasileño, que llegó avalado por Robert Fernández como supuesto relevo para Andrés Iniesta y ya ha lucido dos dorsales diferentes --14 y 7-- en sus dos trastabilladas etapas como blaugrana, sigue en el club y todavía aspira a revertir la situación para terminar triunfando. Aunque pocos en Barcelona apuestan por él, en esta segunda estapa ha sido listo: ya no vive en la casa de Cesc. Estuvo allí instalado cuando llegó al Barça en invierno de 2018. La dejó al salir cedido rumbo al Bayern y, desde que regresó el verano pasado, está en una zona menos alejada del estadio. Eso sí, mantiene una espectacular piscina privada con enorme terraza. Se nota que el brasileño es de los que mantiene un salario más elevado en la plantilla. 

Máxima expectación y gol al Madrid

Como Cou en esta segunda etapa, el Kun también ha sido listo y finalmente ha evitado la maldita casa de Cesc Fàbregas. Ello no le libró de sufrir una lesión muscular al poco de comenzar los entrenamientos con el Barça que le privó estar en el Gamper cuando la marcha de Messi todavía quemaba en Barcelona. Sin embargo, debutó recientemente contra el Valencia y repitió unos minutos contra el Dinamo de Kiev en Champions, hasta que finalmente se estrenó en el clásico contra el Real Madrid. Su participación ha sido más sonada por el apoyo que le ha brindado la afición que por lo poco que ha podido demostrar dentro del campo, pero en el Camp Nou reina la ilusión por ver triunfar a uno de los recién llegados este curso. Habrá que ver si su apartamento en Barcelona le da más suerte que a los otros la casa de Cesc.