Los jugadores del Barça no pasan por su mejor momento, y no por su carrera profesional donde están obtenido grandes resultados. En los últimos meses dos de los jugadores del equipo blaugrana sufrieron robos en sus casas. Mientras Jordi Alba viajaba por compromisos profesionales para enfrentarse al Inter de Milán, unos ladrones se colaban en el interior de su vivienda. Su mujer Romarey Ventura, su hijo Piero y la asistenta se encontraban en el interior. Al escuchar unos ruidos salieron corriendo del lugar y dieron la voz de alarma. Los ladrones desvalijaron toda la planta de arriba.
Inmediatamente abandonaron la casa y esta fue ocupada a las pocas semanas por el nuevo fichaje del Barça, Prince Boateng. El jugador volvió a sufrir un robo la pasada semana, mientras el Barça se enfrentaba al Valladolid. En esta ocasión se llevaron relojes y 400.000 euros en metálico. La casa ya se la conocían a la perfección. La policía sigue investigando estos robos mientras las casas de Messi y Suárez están en peligro.
Depay, Tousart y Diop, víctimas de los ladrones
El pasado martes 19 de febrero, el Barça se enfrentó al Lyon. En esta ocasión ninguna vivienda de los jugadores sufrió un robo, sino que esta mala racha se traspasó a los integrantes del equipo francés. Concretamente a Memphis Depay, Lucas Tousart y Pape Diop. En el caso del holandés le sustrajeron joyas y ropa por un valor que todavía no ha sido revelado.
Para Depay esto no es algo nuevo, es la segunda vez que sufre un asalto en su vivienda. El pasado 31 de agosto le robaron un botín superior a un millón de euros. En el caso de Tousart forzaron la puerta de entrada, se llevaron varios objetos pero fracasaron en el intento de robar también un coche del garaje. De la casa de Diop lograron un botín de joyas y prendas de marca. Los ladrones optan por ir a lo grande.
Dani Alves, la última víctima
Parece que los ladrones se han olvidado un poco de los jugadores del Barça y se han trasladado a Francia para desvalijar las casas de los jugadores del PSG. Esta vez el gran susto y cabreo monumental se lo ha llevado Dani Alves. El robo se llevó a cabo, como es habitual en la estrategia de estos ladrones, mientras este jugaba un partido. Justo la noche del miércoles 20 de febrero cuando el equipo parisino disputaba un encuentro en el Parque de los Príncipes donde ganó el PSG 5-1.
La alegría por la victoria a Dani Alves le duró muy poco. El jugador vive en una mansión en la zona de Neuilly-sur-Seinne. Los ladrones escalaron la fachada de la casa al más puro estilo Spiderman y empujaron una ventana del primer piso que curiosamente estaba abierta.
Antes de marcharse corriendo se llevaron varios relojes de lujo encontrados por las diferentes estancias de la casa del futbolista. Todavía no ha sido comunicado el valor de la incautado pero podía ascender hasta varias decenas de miles de euros.
Según las investigaciones iniciales, el sistema antirrobo de la casa de Dani Alves no estaba activado en aquel momento. De momento, igual que pasa en la ciudad catalana, la policía empieza a investigar estos asaltos en las casas de los jugadores del PSG.