Pablo Lloret Martín sigue desaparecido. Desapareció hace un mes en la estación de autobuses de Alicante. El 13 de abril fue la última vez que se supo de él. Desde entonces su teléfono está apagado.

Su hermana Cynthia reconoce que él “tenía ganas de marchar”, aunque tiene claro que “no de esta manera”. Ella fue de las últimas personas que habló con él. Fue un día antes.

Último contacto

"Era de noche, y me dijo que pasaría por mi casa porque al día siguiente se iba a Valencia". Su intención, o eso le dijo, era ir a un centro de desintoxicación. “Tenía problemas de adicción", reconoce la familiar. La llamada terminó con la promesa de Lloret de llamarla al día siguiente y explicarle todo.

No lo hizo. Ni el 13 ni los días posteriores. Quiso aprovechar que Pablo le comentó que dejaría a su perra en casa de un amigo para decirle que “ya podía traerla, pero no le llegó, el teléfono estaba apagado", indica. La sorpresa llegó cuando descubrió que el animal estaba en la perrera. Desde el 13 de abril.

Un cajero automático con el aviso de la desaparición de Pablo Lloret Martín

Hallazgos

Tras la denuncia de rigor a la policía se dio con varios de sus enseres. Ha aparecido la maleta y mochila de Pablo. Había ropa en ellas e incluso su cartera con toda la documentación. Un recibo hallado entre sus cosas dio otra pista.

El documento indica que Pablo vendió su anillo de oro que siempre llevaba puesto por 150 euros. En su cartera, en cambio, sólo habían 90. La policía mantiene abierta la investigación y mantiene abiertas todas las hipótesis.

Investigación

"Nos han hablado hasta de la posibilidad de suicidio. Él no estaba bien... pero esto de la perrita tampoco no nos encaja", indica Cynthia. Y es que el cánido apareció con una correa que no era la suya.

El llamamiento a la colaboración ciudadana ya circula por redes. Pablo tiene 32 años, mide 1,58m, tiene el pelo moreno y es de complexión atlética. Y tiene algo muy característico, se parece a Juanjo Ballesta, lo que le valió el apodo de El Bola. Tras recibir noticias de que le habían visto en Murcia, Galicia y Benidorm, la búsqueda continúa.