El político Julián Muñoz / MEDIASET

El político Julián Muñoz / MEDIASET

Famosos

La estrecha relación de Julián Muñoz con Isa P y su propuesta a la Pantoja

El político sale en defensa del DJ con una dura crítica a la cantante: "A su hijo Kiko lo ha dejado en la calle"

21 enero, 2022 23:24

La docuserie de Julián Muñoz emitida para Telecinco no sólo es una escusa para dar un mazazo al clan Pantoja. Hay personas que se libran y son los hijos de la cantante.

El político lamenta que cuando obtuvo el tercer grado penitenciario Isabel Pantoja no lo esperó, “estaba en el dentista”. Poco pareció importarle. Se fue a La Pera y allí sólo aparecía el chofer de su amada, Fosky.

Relación con Isa

La tonadillera no apareció nunca. Él tampoco quería salir mucho, “sólo salía por las noches” pero echaba de menos a Isa P. Tenía una relación muy especial con ella y llamó a la madre para que la entonces niña fuera a verle. Esta vez, accedió.

“La niña y yo teníamos un juguete en común, Caifar”, un pequeño perro con el que ambos jugaban y pasaban el día, mientras la artista ni aparecía. “Dulce era la que se encargaba de esa niña”, señala.

Propuesta

El amor que sentían el exalcalde de Marbella y la menor era recíproco. “Sentada en la escalinata, me dijo: ‘Porque no volvéis mi madre y tú’”, apunta él. “La quiero mucho, así de claro. Y si le molesta a la madre… Es que el querer a una hija se lleva en el corazón”, sentencia.

Los recuerdos entre ambos son tan bonitos para él que le lanza una propuesta a Isabel madre acerca de Chabelita. “No me importaría verla para nada”, asevera.

Kiko Rivera

Kiko Rivera era mayor y la relación con él no era tan estrecha. Él “era siempre un chico independiente” eso no quita que no lo quiera. “No quiero ver a esos dos chicos sufriendo”, afirma. Pero pasó.

La relación con sus hijos no era lo que más le importaba a la Pantoja, sino que Julián se veía con Karina y no abandonaba Cantora y lo echó. “Yo fui un capítulo de su vida y lo cerró cuando a ella le dio la gana”, matiza al respecto. “No se portó bien conmigo. A una persona destruida no se la puede dejar en la calle. Y tenemos un ejemplo: A su hijo Kiko lo ha dejado en la puta calle”, concluye.