Los cortes de pelo de Shakira que la delatan frente a Hacienda

La melena de Shakira podría ser una de las pruebas principales de Hacienda para demostrar que la cantante no pagó impuestos en España entre 2011 y 2014 aunque sí vivía en Barcelona. La colombiana insiste en que en ese momento residía en Panamá y que no fue hasta 2015 cuando se instaló en la Ciudad Condal, pero sus facturas en una peluquería del centro de la capital catalana apuntarían a lo contrario.

Según recoge el diario El Español en su sección JALEOS, los constantes cambios capilares de la cantante evidencian sus visitas a su peluquero, Jordi Ripoll. En el periodo de cuatro años que según Hacienda Shakira no tributó en España, la cantante cambió hasta 20 veces de corte de pelo.

Siete cambios de look en un año

La largura, el estilo, el volumen o el flequillo y las extensiones de quita y pon son la tónica en los diversos looks de la colombiana en esa temporada.

Las imágenes de ella entrando y saliendo de una peluquería de la zona alta de Barcelona eran rutinarias, y durante 2011 realizó más de siete cambios de look, todos estando en Cataluña. Esa es la prueba más evidente de que apenas cruzó el Atlántico ese año salvo en puntuales ocasiones para asistir a algún evento en Latinoamérica o Estados Unidos.

Las facturas, la gran prueba 

El año siguiente "sólo" se cambió tres veces el peinado. Más tarde, en 2013, Shakira modificó su melena en cinco ocasiones, y así hasta llegar a 20 estilos diferentes. 

La mujer de Gerard Piqué asegura que su mudanza oficial a Barcelona fue cuando ya tenía a sus dos pequeños y decidió establecer su núcleo familiar en el municipio de Esplugues de Llobregat. Sin embargo, la Agencia Tributaria no cree esa teoría y se aferra a las pruebas documentales. Las facturas de peluquería y gimnasio atestiguarían que Shakira ya estaba instalada en la Ciudad Condal durante el periodo que se denuncia.

Por ahora, la artista internacional ha pagado 20 millones de euros para hacer frente a parte de la deuda. Además, ha hecho público que está tranquila y se muestra confiada en que, finalmente, el proceso le de la razón.