Sigourney Weaver ha sido la tercera actriz reconocido por el Goya Internacional que entrega la Academia del Cine español. La intérprete estadounidense ha acudido a la 38 edición de la gala y no ha dudado un momento en agradecer su premio a una mujer y compañera muy especial. María Luisa Solá.
Lo ha hecho con gracia, recordando que su "amigo Bill Murray me dice que mi interpretación es mucho mejor cuando me doblan al español", por eso no ha dudado en mencionar a esta catalana que le ha puesto voz en castellano en un total de 39 películas. Y añadió, "ella también tendría que estar aquí en el escenario".
El momento de los Goya
Para muchos, el mundo del doblaje pasa desapercibido, otros lo rechazan. En cualquier caso, es un trabajo que ayuda a los espectadores a acudir al cine y que, en muchas ocasiones, pasa desapercibido. Sobre todo, porque nadie pone cara a esas voces. Bien, sí lo hace, pero la cara que no corresponde.
María Luisa Solá es un caso. A pesar de que ha sido Weaver la que le ha agradecido su tarea, esta barcelonesa de 85 años es, sobre todo, la voz española de Susan Sarandon. Hasta en un total de 61 ocasiones le ha puesto voz. Y no ha sido a la única.
Un largo currículum
En su curriculum de doblaje aparecen otras actrices reconocidas de la talla de Helen Mirren, Glenn Close, Diane Keaton, Kim Basinger o Jane Fonda. Pero estas son sólo algunas de las más de 100 actrices a las que ha puesto voz, incluidas algunas actrices clásicas como Katherine Hepburn, Ingrid Bergman, Jeanne Moreau, Claudia Cardinale o Kim Novak.
La lista es interminable y, en cambio, no es un rostro conocido. Y no, no es el de la princesa Leia. Es el de una mujer nacida al final de la Guerra Civil, en 1939, en Barcelona. Allí dio algunos pasos como actriz, pero, sobre todo, como dobladora. Su carrera fue meteórica.
Un esperado reconocimiento
Empezó muy joven, en los años 50 y hasta hace relativamente poco, con 83 años seguía adelante, doblando sin parar. En su haber hay más de 3.000 proyectos en los que ha participado y, a pesar de que muchos hayan escuchado por primera vez su nombre, en su trabajo es una profesional más que reconocida.
Weaver ha puesto su nombre en la palestra, pero también podría haber dicho el de Carme Elías, quien también la dobló, o el de tantos otros dobladores que han acercado al cine al público. Nunca los Goya tuvieron palabras hacia este trabajo, sólo en el video del in memoriam. Por eso, el gesto de la actriz estadounidense ha sido tan aplaudido en redes.