Neisha: "En el reguetón veo gente haciendo intrusismo porque está de moda"

Neisha regresa a la escena musical catalana con Anime en català, un disco en el que profundiza en su pasión por el manga y las series de anime con referencias claras a algunas de las producciones que más le han marcado. La joven se centra en su crecimiento personal lleno de historias que relata a través de melodías de trap, reguetón y dancehall. 

"Me gusta el reguetón y que lo hagan los hombres, aunque digan cosas que sexualicen a las mujeres. Sí que hay algunas canciones que me molestan un poco más, por ejemplo, últimamente hay una que dice 'Bebé no te hagas tú eres under', que ya el hecho de estar con menores de edad señores que tienen 40 y 50 años es algo que veo más controversial", expone en una entrevista con Crónica Directo.

--Estrena disco, ‘Anime en català’, ¿cómo se siente?

--Me siento como si acabara de tener un parto. No tengo hijos, pero más o menos. Todo el tiempo de preparación y ahora el momento de compartirlo es muy bonito y emocionante. Hacía más de un año que estoy trabajando en este álbum. 

--¿En qué momento creó el concepto?

--Escribí una de las canciones, que es One Piece / Eva, antes de saber que iba a hacer un álbum con este concepto. Fueron pasando los días e iba viendo que las referencias que me apetecía usar para componer mis canciones en esta época iban todas muy ligadas dentro del mundo del manga y del anime. Es mi día a día cuando veo series y el contenido de internet que consumo. Fue algo muy orgánico porque es el lenguaje que uso ahora mismo para expresarme y hablar de mis cosas a través de estas referencias.

--¿De dónde le viene este interés por el manga y el anime? 

--Yo soy de la generación del Club Super 3, y ya desde pequeñita consumía los títulos principales que nos han acompañado. Ahora desde hace un par de años me he vuelto a enganchar y estoy más dentro que nunca. 

--¿Cómo traslada todo eso a la música?

--Me gusta el concepto del shonen o los shojo, que son estos animes de crecimiento personal de un personaje como Son Goku o Sailor Moon. Quería llevar este concepto de crecimiento personal y avance como persona y artista con referencias de letras, usando personajes, cosas que les pasan y uniéndolo a lo que me pasa también a mí. He usado la estructura de una temporada de anime para crear el disco, con un opening y un ending, y las canciones son los capítulos que yo voy viviendo.

--¿Están relacionadas las canciones más allá que por el concepto?

--Las canciones del disco sí que están ordenadas de forma que queden bien a nivel sonoro, pero aun así sí que seguimos esta estructura de temporada de anime y se supone que del principio a fin hay una evolución en mi personaje y lo explicamos de esta manera.

Retrato de la artista Neisha en plaza de Urquinaona / LUIS MIGUEL AÑÓN

--El primero y el último tema podrían ser el inicio y el final de una serie de anime.

--Me hacía mucha ilusión hacerlo, creo que era necesario con el concepto del álbum, y la verdad que me he divertido muchísimo, son mis canciones favoritas y me podría hacer un disco entero así porque me ha encantado hacerlas.

--También hay trap, dancehall, una bachata... ¿Cómo ha encontrado el sonido que quería para las canciones?

--Siempre me apetece hacer mi propia versión de la música que escucho. La gente normalmente me encastilla más dentro del reguetón y el dancehall, pero yo escucho rap de toda la vida y trap desde hace 10 años y quiero hacerlo también. A lo mejor no es lo que convenga porque es una música que a veces está apartada, pero me apetece hacerlo porque es la música que escucho y pienso quiero hacer mi versión. 

--¿Ha estado muy presente en todo el proceso?

--Me encanta escribir letras, componer melodías y luego ir al estudio y grabar. Yo voy buscando qué me apetece hacer. Por ejemplo, si veo que ahora me apetece hacer un dembow, pido que me manden algo y me escribo la letra. Me apetece seguir haciendo más canciones de trap y más adelante me veo haciendo algo como Dolcessa Bruna, que es del EP en el que musico poemas. Cambiar de géneros también me apetece e investigar por la electrónica.

--En sus letras es muy explícita, ¿cómo es su proceso de composición?

--Cada vez que me divierte algo pienso en hacer un tema sobre eso y cada vez que me enfado con algo pienso en escribir una canción para canalizarlo por ahí. Primero escribo cuatro ideas en un borrador y luego ya le voy dando melodía para que no se quede ahí.

--¿Qué le ha enfadado últimamente?

--Realmente hay un malestar social general importante y eso me ha inspirado en alguna canción como la de Friki, chingona. A veces también cosas personales y relaciones. Es un proceso terapéutico escribir. A veces creo que me paso un poco, pero es como una forma de llevarlo lejos y a la vez honrar también mis sentimientos, mis emociones y sacar algo bonito de eso.

--¿Se pone límites?

--El tema de One Piece / Eva, que es el primero que compuse, sí que es bastante explícito. Yo me pongo a escribir, estoy sola con el papel en ese momento y no pienso en que me van a escuchar y censurar, entonces me dejo ir. Pero sí que me gusta investigar desde otros puntos también, no siempre desde lo más explícito o lo más carnal, y también es un ejercicio que me gusta hacer para escribir sobre otras cosas.

Retrato de la artista Neisha en la boca del metro de Urquinaona / LUIS MIGUEL AÑÓN

--¿Hay machismo en el reguetón?

--A mí me gusta el reguetón y que lo hagan los hombres, aunque digan cosas que sexualicen a las mujeres. Sí que hay algunas canciones que me molestan un poco más, por ejemplo, últimamente hay una que dice “Bebé no te hagas tú eres under”, que ya el hecho de estar con menores de edad señores que tienen 40 y 50 años es algo que veo más controversial, como dedicarles canciones a las menores de edad y que sean con notación sexual. Pero celebrar el cuerpo, la música, el sexo y la conexión con los cuerpos no lo cuestiono.

--Se está formando una nueva escena musical en Cataluña de música urbana en catalán. ¿Qué le parece este movimiento?

--A mí me hace mucha ilusión, estoy recuperando la ilusión de ver a estas chicas como Julieta, Mushkaa, y las que ya llevan unos añitos, que tienen referentes reales. A veces veo gente haciendo un poco de intrusismo porque algo está de moda, y eso no acaba de sonar a lo que tiene que sonar, no me lo creo. En los premios Enderrock vi a Julieta y vi que tiene referentes de reguetón guays, igual que a Mushkaa últimamente la estoy viendo en vídeos y engancha.

--Lleva unos años en la música, ¿cómo ha sido su crecimiento?

--Fue muy divertido al principio empezar con el grupo Crimen Pasional como ensayo-error, íbamos aprendiendo a la vez que estábamos ya un poco en punto de mira público. Cuando se terminó en 2019 yo sí que, al escribir canciones, sentía que las estaba escribiendo para Crimen Pasional, pero en solitario. Necesitaba un reset y por eso me puse a investigar poemas, a leer bastante poesía, y me apetecía musicarlos para hablar de mis cosas a través de los poemas usando palabras de otros autores. Ese proceso y el paso del tiempo que ha habido entre medio, ha sido para mí todo un éxito, a nivel de que cuando me he puesto de nuevo a componer mis letras y mi música, siento que suena completamente a Neisha. Si lo hubiera hecho en 2020, no hubiera salido igual. Agradezco a la etapa de Dolcessa Bruna y de musicar poemas, y lo volveré a hacer. Creo que va a ser una cosa que voy a usar cada vez que quiera cambiar de etapa.

Posado de Neisha en las calles de Barcelona / LUIS MIGUEL AÑÓN

--¿Qué le espera en los próximos meses?

--Ahora que está recién salido el álbum se vienen unos meses intensos. No tengo contrato de booking y management y me lo estoy haciendo yo. Si alguien tiene alguna propuesta, me la puede enviar por mis redes sociales. Tengo algunas cositas cerradas, otras están a medias y no puedo anunciar. Tengo mucho contenido visual del álbum y ganas de hacer unos fanzines. Más que nada es pasar el rato con las amigas, seguir haciendo con diferentes soportes artísticos mi proyecto e ir moviendo esto un poco para ver qué viene. Sobre todo, seguir haciendo música, trabajando y estar disponible.