Semana y media ha durado la promesa de Alessandro Lequio de guardar silencio respecto a la decisión de Ana Obregón de optar por la gestación subrogada para ser abuela. Las primeras informaciones revelaban que él estaba al tanto de todo, pero hace apenas unos días admitía que le estaban "contando cosas de las que no estaba al tanto".
La última portada de ¡Hola! tiene buena parte de la culpa de estas palabras y de que este lunes de pascua decidiera hablar. El martes noche se conocía que Aless Lequio es el padre de la niña que la bióloga tiene en sus brazos en la portada de la revista, lo que convierte al italiano en abuelo. Mientras, los rumores de que esto habría generado malestar en su familia han ido a más.
Momento complicado
Ante todo, este aluvión de dimes y diretes, el colaborador de El programa de Ana Rosa ha decidido aclarar algunos puntos, aunque lo que ha quedado claro es que su exesposa no le tiene a corriente de todo. Primera pista, sus palabras sobre el nombre y/o apellido de la niña, Ana Sandra Lequio. "Yo creo que es nombre", lanza.
En todo caso, se intuye que hay cierto resquemor y dolor, mucho dolor. "Esta situación es tremendamente triste, es muy triste. Muy complicado", revelaba al ser preguntado sobre el asunto de su exmujer. Lequio asegura sentirse “muy presionado” ante la “gran expectación” que genera su presencia en los platós y la posibilidad de que él se posicione en medio de una polémica que ha trascendido el ámbito del corazón. En todo caso, se mantenía en que iba “a comentar nada", pero no lo ha cumplido.
Reproches
Sobre la decisión de Obregón recuerda que "en la vida cada uno lleva el luto como puede y como quiere”. En el suyo, recuerda que “desde que falleció mi hijo el 13 de mayo de 2020, todos habéis sido testigos de que mi única opción ha sido el silencio”. “Nunca he comentado nada, nunca he dicho lo que yo sentía y eso es lo que voy a seguir haciendo porque se que a él lo que le gustaría, por el máximo respeto que le tengo. Yo no voy a comentar nada que le afecte en ningún sentido", subraya
En todo caso defiende que “es entendible” que a él está situación le produzca “tristeza y rabia” por el hecho de que su hijo, “sea una vez más protagonista de la actualidad”. Allí ha venido su primer reproche a Ana Obregón: “Quiero que cada uno lo lleve a su manera, pero yo no puedo ver cada vez que enciendo a la televisión a mi hijo porque duele. Entiendo el trabajo de los periodistas, pero quiero que se olviden de mí porque duele".
La relación
Pese a todo, desmiente que haya mala relación con la actriz. "No hay ninguna mala relación, no interpretéis, no hay nada. Todo bien, paz y amor cada uno a lo suyo. Yo no he dicho nada y me choca que haya gente que interprete mis silencios si yo no he dicho nada. Es una familia estupenda y sin ningún problema”, sentencia.
De lo que no ha dicho nada es de si todo esto ha generado algún malestar con María Palacios o su entorno. No ha entrado en el asunto. Sigue su máxima que aplica desde hace tiempo en torno a su vida privada: ni una palabra. Fiel a su decisión de guardar silencio, el colaborador asegura que va a mantener su postura ya que es un tema muy complicado para él, por lo que a día de hoy sigue sin hablarlo con nadie de su alrededor: "No voy a hablar porque quiero que se olviden. No me preguntan ni mis amigos ni mi familia. Yo pido respeto y ya está, que cada uno haga lo que quiera que yo lo respeto también. Vosotros me conocéis y sabéis que no voy a cambiar".