Carlos Rivera: "Tuve un momento existencial de pensar qué pasaría si no llegaba a las expectativas"

El cantante mexicano Carlos Rivera se ha abierto por completo en su nuevo disco, Sincerándome, 10 nuevas canciones llenas de sentimiento y verdad. Este séptimo álbum es el resultado de una profunda reflexión personal en la que el artista ha querido compartir sus experiencias más íntimas y personales. En los próximos meses, el artista recorrerá el mundo con su gira Un Tour a todas partes.

"Madrid es un lugar que me cambia la vida al llegar hace 12 años con El Rey León. Especialmente algo que empezó a ocurrir dentro de la industria de la música allí es que no terminaba de conquistar mi propio país, y yo sentía que venía aquí y cada vez conquistaba más España", expone el intérprete en un encuentro con Crónica Directo durante su paso por Barcelona.

--¿Cómo nace este disco, ‘Sincerándome’?

--Aposté por hacer un disco muy personal, muy íntimo. No tanto por querer hablar de mí o de lo que me pasa, sino porque yo quería conectar desde el origen de las emociones. De entrada, yo no conozco mejor ninguna que las mías. Son canciones que tal vez en otro momento hubiera ido compartiendo de una en una porque son tan personales que sentía que solo yo las podía entender. Sin embargo, ya es mi séptimo disco, en algunos de los otros había metido una que otra de este tipo y terminaban siendo las que más conectaban al paso del tiempo y se iban quedando. Algunas de ellas, que nunca fueron estas canciones pensadas para ser el mainstream de mi música, eran las que al paso de los años más escuchas tenían y las más pedidas en los conciertos. 

--¿Qué quería conseguir con este disco?

--Este álbum entero son ese tipo de canciones y me lo permití porque quise hacer un disco que, más que pensado, estuviera sentido. No es un álbum que trae ese tipo de premeditación, simplemente sucedió y yo lo quise compartir. Fue casi como con un canasto recoger todas las canciones que yo había hecho más sinceras y que aún no había compartido. Son canciones que dicen todo lo que yo necesitaba decir y muchas de ellas no tienen estructura típica comercial. Por cómo se vive actualmente el mundo de la música, debutamos en el top diez mundial de álbumes en esa semana en Spotify y está teniendo un de boca en boca muy bueno.

--¿Es arriesgado hacer ese tipo de música ahora?

--Como en todo en la vida, siento que debe haber siempre opciones y del tipo de música que yo hago cada vez hay menos. Nosotros ahora somos el pop alternativo, imagínate, pero es bueno porque tal vez en el momento en el que la gente se cansa de escuchar lo mismo, voltea hacia un lado y de repente ahí estés tú ofreciendo lo que haces. En la parte del directo es donde más encuentro el peso y el apoyo de la gente, porque llenamos los sitios a donde vamos. Esa es la verdadera respuesta porque ahí no hay engaño, no es una sola persona escuchando mil veces la misma canción. He planeado una gira de 20 países con más de 100 ciudades en el mundo y me siento muy afortunado porque creo que este tipo de canciones sigue vivo y sigue habiendo muchísima gente que lo quiere seguir escuchando.

--¿Qué quería transmitir con ‘Sincerándome’?

--Sincerándome es la canción que abre el disco y me abre a mí en canal literalmente a compartir todo lo que a veces no compartiría en entrevistas. Las canciones las hago sin pensar, porque necesito decirlo, y luego ya decido si las quiero compartir. Estas eran demasiado reveladoras con lo que yo vivo, ya sea en mi vida personal, en pareja, en familia, incluso en mi vida como persona, en lo que pienso cuando estoy solo. Especialmente Sincerándome es ese momento en el que empiezo a tener este punto existencial de decir: ¿qué tal si no soy todo eso que se piensa de mí? ¿Qué tal si no llego a la expectativa? Hoy que lo he compartido me he dado cuenta de que son miles de personas que se sienten igual. Se convierte en una comunidad muy grande de personas que me dicen que están conmigo como yo estoy con ellos con mi canción.

--En un vídeo de ‘Sincerándome’ se abre en canal y aparece llorando.

--Sí, es fuerte. Yo siento un antes y un después desde que la escribí y también un antes y un después desde que grabé eso. Son de esas cosas que tal vez no hubiera compartido, porque los artistas compartimos la parte buena, bonita y arreglada, pero fue muy mágico lo que pasó ahí y un alivio sacarlo fuera. Si la canción y el disco se llaman Sincerándome, quería que la gente me viera y me conociera en la parte más vulnerable donde no hay maquillaje, vestuario e iluminación. Como te digo, no hay nada pensado como tal, he estado haciéndole caso a mi intuición en todos los sentidos, desde la portada, las fotos, cómo quería que se comunicara. Es un álbum que piensa mucho más en querer compartir lo que yo soy, lo que siento, diciéndole a la gente que todos somos humanos y, a pesar de que hoy el mundo exige demasiado de nosotros, nosotros también nos merecemos a veces respirar, exhalar y continuar. 

--¿Cómo fue el proceso de grabación?

--Muchas de las canciones se grabaron con todos los músicos al mismo tiempo. Estábamos en diferentes salones, pero escuchándonos todos en directo. Hay música y arreglos que nacieron en directo. A lo mejor el piano y la guitarra están tocados de una manera tan delicada, tan particular, porque van acompañando a la voz a la vez que la voz va acompañando lo que ellos hacen. Eso lo hace cada vez menos gente porque no es fácil y, sin embargo, todos estaban dentro de una magia, de algo especial. Hoy la gente lo escucha y a lo mejor puede sentir un poquito de esa magia y por eso también le llame tanto la atención el disco. Podrías pensar que es un álbum como otros muchos que he hecho, pero todos me dicen que este es el disco más bonito. Eso es lindo porque quiere decir que algo les moviste, que hay algo que al escucharlo les genera cierto bienestar. No hay nada mejor para uno como artista que saber que lo que le aportas a la gente con tu música sea algo bueno y algo positivo.

El cantante Carlos Rivera / CEDIDA

--Cada canción cuenta con su versión acústica.

--Lo empecé a hacer en mi tercer disco. Siempre hacía los acústicos en la edición Deluxe y tenían muy buena respuesta, hay vídeos de esos que tienen 250 millones de reproducciones. A partir del disco Guerra decidimos sacarlos al mismo tiempo. En esta ocasión, el lugar donde se grabaron es como una especie de granero y caballerizas de una casa muy histórica y antigua del pueblo donde yo nací, que además adquirí hace poco tiempo. Ya que el disco se titula Sincerándome se me ocurrió que se hiciera desde un lugar que para mí era importante y que tiene significado. Hicimos todos los acústicos y eso los produzco yo junto con Jules Ramllano, que es también un gran amigo con quien he escrito muchas canciones.

--No sabía que también producía sus canciones.

--Sí, siempre me meto mucho en lo que hago en la música. Poca gente lo sabe, pero en la última película del maestro Carlos Saura la música está escrita y producida por mí junto con Alfonso González Aguilar.

--El álbum tiene colaboraciones. Al ser un trabajo tan personal, ¿cómo ha elegido a las personas que participan?

--Por ejemplo, Carlos Vives está porque la canción realmente se había hecho primero en una versión de folklore mexicano, pero como mi productor es colombiano dijo que la canción podría volverse vallenato. Sonaba increíble y decidimos invitar a Carlos. Es una canción que está escrita para mi tierra y se implicó muchísimo, me emocioné cuando lo escuché. Luego, por ejemplo, Melissa Robles, que es la voz femenina de Matisse, un grupo en México que está creciendo mucho, está invitada porque hace 10 años apenas lanzaba una canción que se llama Fascinación y me metí a Youtube y encontré un cover de ella con su ukelele. Me pareció bellísima y la publiqué en Twitter. Los de mi discográfica Sony la vieron y decidieron firmar con ella. A ella le cambió la vida porque ni siquiera pensaba en dedicarse a la música. También están Carin Leon y Eden Muñoz, que le dan el toque mexicano a Alguien me espera en Madrid. Y Nahuel Pennisi es un artista argentino de folklore que nació ciego y toca la guitarra de una manera única en el mundo, nadie puede tocar la guitarra como él porque nadie le enseñó. Me encanta porque su magia es única y no hay otra manera de describirlo.

--¿Qué han de tener las personas con las que colabora?

--Hago colaboraciones fuera de mis discos con gente como Maluma, con Becky G, con Pedro Capó... Pero las colaboraciones de mis álbumes para mí tienen mucho significado. Me gusta mucho que la gente descubra artistas por mis discos. Ya me ha pasado, por ejemplo, en su momento con India Martínez, que en México no era en ese tiempo tan conocida y a raíz del disco la empezaron a buscar. Había invitado a Abel Pintos, ha estado Vanessa Martín, que aquí sabemos que es gigante, pero hay muchos lugares donde escuchan mi música en Latinoamérica que la han descubierto a raíz de la canción. Me gusta que haya gente que yo admiro o que tenga algo que ver conmigo. 

--Dedica una canción a Madrid, ¿por qué?

--Habla de Madrid, pero se refiere a España entera. Es un lugar que me cambia la vida, que al llegar hace 12 años con El Rey León, a los dos años lo dejo, empiezo con mi proyecto de mi disco y me tengo que regresar a mi país. Estando en México yo echaba mucho de menos mi vida aquí. Especialmente algo que empezó a ocurrir dentro de la industria de la música allí es que no terminaba de conquistar mi propio país, y yo sentía que venía aquí y cada vez conquistaba más España. Ahí hice esa analogía. Esa canción nació por un momento que yo sentía que era sincero y tardé en grabarla casi 10 años.

El cantante Carlos Rivera / CEDIDA

--¿Qué otras canciones ha rescatado de hace años?

--Luego Eres tú (Mamá) tiene 20 años y Siempre estaré aquí tiene 19. Son las únicas tres que rescaté del pasado. Las quise grabar porque sentía que eran canciones que hablaban de un momento muy especial de mi vida y muy importante en el que yo me sinceré diciendo lo que sentía. Siempre estaré aquí, por ejemplo, es una despedida a mi familia cuando yo me voy a Ciudad de México a cumplir mi sueño con un programa que se llamaba La Academia. La de mi mamá surgió cuando no tenía dinero para regalarle nada en el Día de la Madre y le escribo esa canción.

--¿Por qué recuperarlas?

--Cuando escribí Sincerándome y decidí que el álbum se llamara así, creí conveniente que todas fueran canciones en las que me sinceré en algún momento por alguna razón. Luego incluso canciones que, a lo mejor, si el disco se hubiera llamado de otra manera, no las hubiera metido, como Mi Niña Linda, que es una canción muy particular que se la escribí a mi hermana. Luego también están las de mi historia de amor y la de Sincerándome que es para mí, para desahogarme. La gente puede escuchar el disco completo y conecta con una canción u otra, y eso es bueno. Creo que mucha gente valora el hecho de que tú puedas escuchar mi disco y descubrir canciones para dedicarlas a quien sea que tú quieras. En cada álbum me gusta tener canciones para diferentes estados de ánimo, tipos de amores y, por lo tanto, se vuelve mucho más universal.