Ayer por la tarde Sálvame informó de que el padre de Anabel Pantoja, Bernardo, se encontraba de nuevo ingresado en un hospital sevillano por una infección. Algo que preocupaba a sus familiares pero, ¿a la pantojita también? Los colaboradores cuestionaron que la exsuperviviente no hubiese ido a ver a su padre en estos momentos tan delicados.
Sin embargo, harta de las especulaciones, ha sido la propia Anabel la que ha entrado en directo en el programa de Telecinco esta tarde para contestar a todas las críticas. "Vende mucho decir que está solo y que la hija está en un yate. ¡Estoy harta! Tengo mi vida y decido qué hacer y si me equivoco me equivocaré", ha estallado.
No se tiene que justificar
La colaboradora ha sido muy clara con el programa: "A mí no me tenéis que decir donde tengo que estar, estoy cansada de los valores que me tenéis que dar todas las tardes". La sobrinísima ha asegurado que ella está informada en todo momento del estado de su padre y que si va a estar o no a su lado, lo va a hacer ella "en la intimidad".
"Es muy fácil exagerar todo, a quién no le guste lo que yo hago, que no me mire, que me olvide", ha dicho Anabel muy enfadada. La influencer no quería tener que justificarse con ninguno de sus compañeros y les ha espetado: "¿Qué coño os importa su vida privada?". Si bien es cierto, la salud de su padre es un tema que le toca la fibra sensible.
Pide perdón
Anabel ha querido dejar claro que a ella se le ha "contado todo" sobre el estado de su padre y que no va a dar "ningún parte médico" sobre su salud. Además, critica que solamente hablan de él para sacarla a ella: "¡Lo lleváis claro! Tocar a mi padre enfermo y a mi madre es lo último que me merezco. No voy a Sevilla porque a mi me lo pida un programa eh, cuidado".
Después de una acalorada discusión y una larga pausa publicitaria, la colaboradora se ha calmado y se ha disculpado con la audiencia y con sus compañeros: "Quería pediros perdón porque estoy muy nerviosa. He petado y lo he pagado con vosotros". La influencer asegura que haber vuelto a su casa en Arguineguín (Canarias) le ha supuesto "un shock enorme" y que todavía se está adaptando a su nueva rutina.
Aclara su futuro y su relación
Es por ello que ha tenido que declinar la oferta de sus compañeros de ir como invitada una tarde al programa: "Ahora mismo estoy en otra división, todavía estoy aterrizando y tengo que organizarme y hacer otras cosas". De hecho, ha confesado que la última noche pensó que la estaban robando en su casa: "Lo pasé muy mal, soy muy miedica".
Antes de colgar, la colaboradora ha despejado las dudas sobre por qué no se ha ido de vacaciones a Mallorca con su novio Yulen Pereira y su madre Arelys: "Yo tengo que estar con los mío y él con los suyos". Anabel cree que no pinta nada en sus vacaciones, pero que a la vuelta ya se reencontrarán.