Hace un mes se filtró un vídeo de contenido sexual donde Santi Millán se grababa manteniendo relaciones sexuales con una mujer rubia que no era su esposa. "No pienso hacer ningún comentario. Yo no quiero decir cómo hay que enfocar las cosas, pero la noticia aquí es que se ha cometido un delito", aseguró entonces el actor.
Poco después, fue su mujer, Rosa Olucha, la que dio la cara por el humorista. "A todos los que me preguntáis 'cómo estás' o me decís cosas del tipo 'lo siento, tienes todo mi apoyo', os comento... Lo primero yo estoy bien. Deberíais de preguntaros cómo está él. Él es el que ha sufrido un ataque a su intimidad, que por cierto, es delito. SU intimidad. Suya y de nadie más", ha dicho Rosa, dejando claro que ella no es ninguna "víctima" ni que son "propiedades. Ni él es mío ni yo soy suya".
¿Relación abierta?
De esta forma, la mujer del catalán dejó entrever que tienen una relación abierta: "Para los que no lo sepan (y ya lo siento), existen muchos tipos de familia. En la nuestra, la libertad, el respeto y la tolerancia son los pilares sobre los que hemos construido este proyecto. Hemos caminado muchos kilómetros juntos y muchos más separados, hemos tropezado mil veces, hemos hablado cuando ha hecho falta. Hemos cambiado el ritmo cuando nos hemos cansado y, de momento, ni tan mal".
"Me da mucha pereza ver que a estas alturas el sexo consentido y privado siga causando escándalos. Sí, señores ¡la gente folla! Dentro y fuera de la pareja. Mierda de sociedad católica y patriarcal". Así las cosas, dejó claro que, en vez de tratarlo como un "escándalo, en realidad tendréis que hablar de 'delitos' o simplemente callar. Espero que los que estaban preocupados por mí, estén ahora más tranquilos. Yo y mi familia, bien. Gracias", zanjó.
Vacaciones
Ahora la pareja ha reaparecido desde sus vacaciones en Menorca y ha compartido muchas instantáneas en las que hacen gala de su felicidad y del buen momento que atraviesan.
Santi Millán y su mujer Rosa Olucha / INSTAGRAM
La mujer del presentador ha publicado una imagen en la que Millán aparece en un barco a punto de tirarse al mar totalmente desnudo. Eso sí, ha tapado sus partes con un emoticono. Asimismo, parece que ella tampoco lleva la parte superior del bikini. Un momento de lo más íntimo para ambos en aguas baleares.