Marta Riesco se contradice a cada segundo que pasa. Mientras que esta mañana se encontraba de lo más "feliz" y "tranquila" en la Feria de Abril en Sevilla, ahora la reportera de El Programa de Ana Rosa pide ayuda a la Policía Nacional por el "acoso" que dice recibir por parte de La Fábrica de la Tele.
"Pido por favor a la Policía Nacional que me ayude con la campaña de acoso que me está haciendo La Fábrica de la Tele. No puedo más. Estoy en tratamiento por su culpa y ahora me encuentro en el hotel con un ataque de ansiedad y sin estar con los míos. Ayuda por favor ante todo esto. Tomen medidas ya", ha escrito la periodista en su cuenta de Instagram.
Ayuda de las autoridades
A pesar de que haya sido ella la que ha publicado la historia de su llamada con el director de la revista Lecturas, Luis Pliego, y la supuesta oferta de trabajo de Rocío Carrasco, Marta Riesco prefiere que sean las autoridades las que tomen cartas sobre el asunto, ahora que se le ha ido de las manos. Así las cosas, acusa a la productora de lo inestable que está mentalmente.
"Me han llamado de todo, han pedido mi despido, han publicado mi número de teléfono en redes, me han insultado, se han metido con defectos físicos, están maltratándome mediáticamente hasta unos límites insospechados. Solo soy una periodista que ha contado una noticia. Pido protección a la Policía Nacional", implora la periodista.
El as bajo la manga, pronto
Unas lamentaciones que distan mucho de cómo se comporta Marta cuando se apagan las cámaras. Según Kitty, la enviada especial a Sevilla de Sálvame, "Marta muestra dos personalidades diferentes: una delante de las cámaras y otra cuando termina de trabajar y sube historias".
Es más, ella misma ha advertido que "muy pronto" conoceremos el as en la manga del que lleva hablando ya varios días sobre su supuesta llamada con Rocío Carrasco, a pesar de que ella ya lo haya desmentido. Un tema que también va a llevar por la vía judicial, ya que ella sí cree en la justicia: "Estoy muy feliz, deseando que la justicia, que es donde yo me defiendo... porque yo sí que creo en la justicia".