Marta Riesco no ha acudido a su trabajo esta mañana. La reportera de El Programa de Ana Rosa se encontraba "indispuesta" y, tras sentirse sobrepasada por la situación que está viviendo a raíz de su romance con Antonio David Flores, ha causado baja voluntaria.
Sin embargo, el programa seguía adelante y su presentador, Joaquín Prat, no ha podido evitar tirarle un tirón de orejas por todo lo que se rumorea por los pasillos de Mediaset. De hecho, se ha mostrado de lo más enfadado con la reportera: "¿A qué jugamos, a hacer la bola más grande o a que no se haga más grande? Lo digo para situarme yo y saber qué puedo y no puedo contar".
Le canta las cuarenta
Con esto, el presentador se refiere a las historias bien dispares que Riesco ha contado, por una parte públicamente y, por otra, a sus compañeros de trabajo. "De esta historia no sabía nada, no voy preguntando a la gente o a compañeros de su vida privada. Aunque algunos no cuentan todo delante de las cámaras y sí hablan por los pasillos", ha lanzado la pullita.
Por eso, Prat ha optado hacerle una petición de vital importancia a su compañera para evitar malentendidos: "Lamento tener que dar la razón a algunos compañeros que vienen hablando de lo que se dice por los pasillos. A la protagonista le digo que deje de hablar del tema si verdaderamente quiere que se corra un tupido velo sobre esta circunstancia".
Vida privada versus vida pública
Visiblemente molesto, ha invitado a la periodista que hable delante de las cámaras y no por detrás como viene haciendo: "Es mejor que lo cuentes todo a que lo cuentes por los pasillos, porque algunos no queremos saber estas cosas y no las contamos, pero hay otros que igual sí las cuentan".
Algo que se contradice con la petición de Riesco sobre que no quiere que los medios hablen de su vida privada y que se la conozca por su profesión: "Quiero seguir levantándome a las cinco de la mañana y hacer lo que me gusta". Una afirmación que, ahora que se ha convertido en la pareja de Antoniodá, se puede poner en peligro.