La prueba de esta semana en Secret Story ha acercado más que nunca a Cristina Porta y Luca Onestini. Durante el transcurso de los días, los concursantes tenían que demostrar sus dotes interpretativas para crear ellos mismos una obra llamada Misterioso asesinato en el tren.

Luis Rollán ha sido el elegido para ser el director de casting y asignar de esta manera el papel de cada uno: amantes que deben darse un beso, muertos, el asesino, investigador... Para escoger a los amantes, Rollán ha hecho pruebas al resto de participantes.

Mucha pasión

Los primeros en interpretar el papel han sido Julen y Sandra, que se han dado un bonito y tierno beso. Pero esta no ha sido la única pareja. Cristina Porta y Luca Onestini no se han cortado ni un pelo y han dado rienda suelta a la pasión.

El hermano de Gianmarco le ha agarrado el pelo a su compañera y se han dado un apasionado beso que ha dejado con la boca abierta a Luis Rollán, a Gianmarco, a Carlos Sobera y a todo el público en el plató. "O las cosas se hacen bien o no se hacen", aseguraba el italiano.