Un año después que se hiciera pública su separación, Paloma Cuevas ha hablado por primera vez sobre su divorcio de Enrique Ponce. Tras 25 años de matrimonio, y otros tantos de noviazgo, el torero dejaba a la empresaria cordobesa para irse con Ana Soria, una joven almeriense de 22 años.
Sin embargo, ahora, la publicación del corazón con más pedigrí de todas lleva en portada a Cuevas, una mujer radiante y renovada que no guarda ningún tipo de rencor a su ya exmarido. ¿Cómo te quedas?
Separación de mutuo acuerdo
Elegantísima, como siempre, la andaluza desvela cómo se encuentra y cómo se ha llevado a cabo la capitulación. Además, adelanta en exclusiva cuáles son sus nuevos retos profesionales. Según destaca la revista, la buena disposición que ha presentado Paloma en todo momento, ha hecho posible llegar a esta situación de buen entendimiento entre ambos.
De este modo, la entrevistada ha dado a entender que la separación se ha realizado de forma amistosa, respetuosa y de mutuo acuerdo. Una manera de proceder muy acorde a la manera de ser de la diseñadora y que parecía imposible a mitades de julio del año pasado; momento en que la protagonista de este extenso reportaje se encontraba sumida en un profundo bache.
Nuevos proyecto profesionales
No obstante, hoy por hoy, el testimonio que presenta Cuevas es el de una mujer ilusionada y con retos profesionales de altísimo nivel. En este sentido, la experta en moda ha confesado que se encuentra trabajando en una nueva colección de diseños propios para la prestigiosa firma Rosa Clará. Una línea de varios vestidos de fiesta que serán presentados en el mes de diciembre.
Previo a ello, la nueva y renovada Paloma deberá encontrarse con Ponce en la comunión de Bianca, la hija pequeña del exmatrimonio. Tras muchos meses de especulaciones, finalmente la modista anuncia que será en septiembre, en una ceremonia en la que no faltará detalle y que lleva muchos meses preparando.