Era una de las entrevistas más esperadas del día. María Teresa Campos ha ido a divertirse a El Hormiguero. El programa que presenta Pablo Motos ha contado la noche de este martes 25 de mayo con la visita de la veterana colaboradora.
Con un aspecto mucho más rejuvenecido que el de su última aparición en Telecinco, el viernes pasado, la comunicadora “ha hecho el salto” a la cadena de Mediaset.
María Teresa carga contra Edmundo Arrocet
Además de tildar de “tontos” a los negacionistas, la emérita de las mañanas ha querido enviarle algún que otro dardo envenenado a su ex, Edmundo Arrocet. Tras seis años de intenso noviazgo, la pareja puso punto final a su relación. O, mejor dicho, el cantante dejaba a la comunicadora por un mensaje de Whatsapp.
Algo que destrozó a la presentadora y por lo que ella emplea el mismo término para referirse al chileno que el que utiliza Rocío Carrasco en la serie documental para referirse a su exmarido: "No voy a estar el resto de mi vida hablando de ese ser. Ese ser pasó por mi vida, fueron seis años más o menos felices, pero ya ni está ni se le espera”.
Edmundo en la cama
Por si fuera poco, la trabajadora de Telecinco ha seguido con su particular carga contra Arrocet, de quien reconoce que prefiere no guardar ningún recuerdo. Sin embargo, Motos no ha dudado en recordarle que la última vez que le visitó estaba muy enamorada.
Y es que la presentadora parece haber suplido perfectamente el lugar que ocupaba en la cama Bigote. Quizá porque en realidad casi nunca durmieron juntos. Además de considerar que incluso prefiere no recordar cómo era el cantante en la más estricta intimidad, Campos ha confesado que duerme cada noche con su perrita Lula.