Blas Cantó ya ha actuado en el festival de Eurovisión 2021 en el escenario Ahoy de Róterdam. Aunque la puesta en escena no gustó mucho desde que se descubrió en los ensayos, ya que era demasiado sencilla, el murciano ha emocionado a todos con su actuación durante la final del  certamen. 

Con él completamente de negro, el fondo se ha mantenido también oscuro. Lo que sí ha destacado es una gigantesca luna de siete metros que va cambiando de color a lo largo de tema. Eso y una iluminación en forma de constelación a sus pies. Blas ha comenzado su actuación a capella para demostrar su gran destreza vocal y el tema ha ido creciendo poco a poco.

Dedicada a su abuela

Blas ha dedicado su canción a su abuela, fallecida por la pandemia del coronavirus durante el año pasado y que era como una madre para él. Por eso el artista se emociona tanto cuando la interpreta y señala al cielo al terminar la actuación. Y es que durante una entrevista previa a su actuación aseguró que cuando está en el escenario se siente "en el cielo con ella".

La propuesta de Cantó para este 2021 ha estado compuesta por el propio artista junto a Leroy Sánchez, Daniel Ortega y Dan Hammond. Voy a quedarme es una balada en la que juega con todos sus registros vocales. Un sueño que se cumple para Blas ya que lleva muchos años deseando participar en el festival.

Apuestas

Blas Cantó ha actuado en el puesto 13, un número que muchos relacionan con la mala suerte. Y es que las apuestas eurovisivas no lo sitúan en muy buen lugar y ocupa los últimos lugares en las encuestas desde que se conocieron los candidatos. 

El intérprete de Voy a quedarme ya adelantó antes de emprender su viaje que a eso “sólo se le da importancia a posteriori, cuando se conocen los resultados”, algo que tampoco parece importarle mucho. Sea como sea, le ha tocado en la primera mitad de la noche, algo que para muchos es un hándicap y hace más difícil ganar.