Xavier Sardá tuvo unas controvertidas palabras sobre las acusaciones de maltrato contra Antonio David Flores. Luego las matizó y condenó la actitud del guardia civil con Rocío Carrasco. Pero tuvo un papel más crucial: ayudó a que se firmara un convenio sobre la custodia de los hijos de la pareja.
Todo empezó con la decisión judicial que determinó que era Rociíto quien tenía la tutela de los niños y que estos verían al padre solo los fines de semana alternos. La presión de Antoniodá en los platós pudo con la madre. Él se quejaba de que apenas podía ver a sus hijos y ella quiso tener un gesto con él, amén de que los pequeños, ajenos a todo lo que ocurría, querían también pasar más tiempo son su papá.
Cambios de opinión
“En un momento de flaqueza yo me planteo darle los niños”, la custodia, ha señalado Carrasco en el capítulo 7 de Rocío, contar la verdad para seguir viva. “Por suerte solo fueron unas horas”, y pronto se le quitó esa idea de la cabeza.
Sin embargo, la madre y sus abogados decidieron proponer a Antonio David que los pequeños pasasen 15 días al mes con ella y 15 con él. Todo, a través de un convenio regulador privado.
Momento crucial
Carrasco y su representante legal firmaron el acuerdo, pero, según ella, esos papeles estuvieron seis meses sin firmar; unos meses que el ex guardia civil aprovechó para seguir yendo a platós llorando porque no le dejaban ver a sus hijos.
Antoniodá seguía en los platós y reclamaba tener más días a sus hijos, hasta que la madre llamó a uno de los programas donde colaboraba, Crónicas Marcianas, harta de las mentiras y para explicar la verdad. Xavier Sardà, el presentador de Crónicas, le cogió el teléfono y fue quien escuchó la historia desconocida del convenio sin firmar. Ante las palabras de Rociíto, el periodista se comprometió a que el padre firmaría el convenio. Y así lo hizo. No importó: Antonio David buscó otras maneras de seguir haciendo negocio a través de sus hijos con Roció Carrasco.