Rocío Carrasco ha continuado explicando en su documental el maltrato físico y psicológico que sufrió por parte de Antonio David Flores. A pesar de que ella tomó la decisión de dejarlo mientras estaba embarazada, se esperó a que naciera su hijo para divorciarse. Sin embargo, su hijo fue hospitalizado al nacer y se alargó la historia.
“Yo no quería que por nada del mundo se llegasen a saber los problemas que teníamos. Quería ser yo la que tomara la decisión de dejarlo. Mi vida era con mucho paripé público, que ardiera y que no se viera el humo”, ha asegurado.
Por sus hijos
“En junio decido que había llegado el momento ya que David estaba mejor. Hasta ese momento no lo había dejado por mis hijos, pero en ese momento vi que no podía seguir de esa manera”, ha confesado Rociíto.
Entonces ella decidió que lo dejaba y que se iba a Chipiona. Cuando él lo descubre “entra en cólera y empieza a gritarme y a decirme que si estaba segura de separarme”. Rocío, segura de la situación, le dijo que sí.
Amenazas
“Pues te vas a cagar. No vas a saber de dónde te van a venir, te vas a levantar de una y te va a venir otra”, le aseveró Antonio David Flores. “Eso me lo dijo gritando, con la mala suerte de que mi madre lo escuchó y empezó a subir las escaleras para gritarle”, ha explicado la hija de Rocío Jurado.
Sin embargo, el ex guardia civil consiguió callar a la más grande: “Tú te callas, Rocío Jurado, no conoces a Antonio David Flores”. Según Rociíto, estas declaraciones la amedrentaron, se calló, se dio la vuelta y se fue: “Él sabía perfectamente el pánico que mi madre le tenía a cualquier tipo de escándalo y él sabía cómo la tenía que atemorizar”.