Una de las principales características que deben tener los buenos intérpretes es la capacidad de transformarse según sean sus personajes, convirtiéndose en auténticos camaleones. Por eso, muchas veces el espectador se queda sorprendido cuando ve a un actor o una actriz que nunca han estado musculados, con un cuerpo que parece esculpido por los dioses.
La última que ha dado de qué hablar ha sido Natalie Portman, ya que está inmersa en la grabación de Thor: Love and Thunder y el guion requiere que se la vea más “fuerte”.
Sujetar el martillo
En este film, la protagonista de Cisne Negro, vuelve a meterse en la piel de la investigadora Jane Foster, personaje crucial en el devenir de Thor, ya que se enamora perdidamente de ella. Y aunque aún no se sabe por qué derroteros transcurrirá la trama, las imágenes que se han visto de la actriz ya han dado las primeras pistas.
Acostumbrados a verla delgada y con un aspecto frágil (más allá de la exigencia que tuvo para interpretar a la bailarina de la citada Cisne Negro), las fotos más recientes de Portman la muestran con una musculatura que no tenía, lo que indica que bien podría ponerse el traje de Thor y levantar el martillo Mjlonir tal y como sucede en los comics.