Mila Ximénez, en sus horas más bajas: "Si me dicen que esto va para largo, se acabó el tratamiento"

Tras varias semanas alejada de los focos y las cámaras, Mila Ximénez ha regresado a Sálvame. La periodista sufre un cáncer de pulmón, una enfermedad que le ha cambiado la vida radicalmente.

De hecho, la televisiva ha llegado a asegurar que se ha pasado un mes sin poder salir de la cama. "No tenía cuerpo. Tengo mucha fuerza, pero cada vez me cuesta más sacarla", ha confesado.

Su decisión más drástica

Por si fuera poco, la colaboradora ha dado a conocer que las pruebas no están saliendo cómo deberían y que está a la espera de nuevos exámenes. Pese a reconocer que estaba feliz de poder volver a su trabajo, Mila revela que, depende de lo que salga en los próximos informes, se planteará si deja la medicación.  

"El otro día vi unas fotos de Pau Donés y dije, yo hasta ahí no voy a llegar, ni de coña. Mientras pueda estar así y pueda venir bien, si me dicen que esto va para larguísimo, se acabó el tratamiento, lo que dure", ha asegurado Ximénez. Y es que detrás de estas duras palabras, se puede ver a una Mila agotada.

Sin calidad de vida

"Está siendo muy largo el camino y muy jodido. Me ha pillado cansada, la distancia con tu familia, la soledad, han sido muchas cosas y fundamentalmente soy una persona que me gusta vivir, pero con calidad de vida", ha continuado.

Respecto a su regreso al programa, Mila ha reconocido que tenía miedo y que estaba muy nerviosa. "No me puedo peinar porque se me puede caer el pelo, lo tengo muy debilitado. Además, puede que a partir de ahora se me caiga la dentadura, me da miedo desmayarme o tener que ir corriendo al baño", ha explicado.