Jeff Bezos, fundador de Amazon, ha decidido dar un paso a un lado y dejar el cargo de CEO que lleva 27 años empeñando, desde que era una simple startup, hasta que se ha convertido en una de las principales compañías de Internet en todo el mundo.
Y no lo hace porque haya habido algún problema en su exitosa gestión; es decir, algún incidente que haya obligado a la junta de accionistas a apartarlo de ese puesto --tal y como ha ocurrido en otras grandes empresas--. Lo hace motu proprio ya que quiere aprovechar su tiempo de otro modo.
¿Por qué se marcha?
Según ha afirmado el propio directivo, se retira en este preciso momento porque Amazon se encuentra en su momento más inventivo y con una estupenda salud financiera. Y lo hace porque quiere dedicarse a otros temas que le apasionan más: las labores filantrópicas, el periodismo y la conquista del espacio.
"Como presidente ejecutivo me seguiré involucrando en importantes iniciativas de Amazon, pero también tendré el tiempo y la energía que necesito para centrarme en el Day 1 Fund, the Bezos Earth Fund, Blue Origin, The Washington Post y en mis otras pasiones", ha explicado al dar a conocer su decisión.
Periodismo y espacio
No cabe duda de que su apuesta por The Washington Post llamó la atención de todo el mundo, ya que no es algo habitual que los grandes jerifaltes tecnológicos se metan en el negocio de la prensa. Ahora, Bezos le dedicará un tiempo que antes no tenía.
Asimismo, su proyecto Blue Origin se ha quedado retrasado --al menos públicamente-- con respecto al de su gran competidor como persona más rica del mundo: Elon Musk, CEO de SpaceX. Así que seguramente el fundador de Amazon no dude en impulsarlo hasta recuperar el terreno perdido.
Filantropía, un clásico
La tercera gran razón de su “retirada” es ofrecer una mayor dedicación a los proyectos filantrópicos que tiene en marcha, algo que se ha convertido en un clásico entre los grandes emprendedores que llegan a la cima partiendo casi desde cero.
Y para comprobarlo, no hay más que echar un vistazo a la trayectoria de Bill Gates, fundador de Microsoft en 1975, que ya hace tiempo que dejó el liderazgo de la dueña de Windows en otras manos.
Bill Gates, otro fundador que se fue
Hasta el año 2008, el nombre más conocido en el mundo de las Tecnologías de la Información desempeñó el puesto de director ejecutivo CEO de Microsoft. Y fue justo al comenzar el siglo cuando decidió dejar ese sillón para tener más tiempo en sus labores filantrópicas con su mujer Melinda Gates.
Desde ese momento, el hombre que cambió el sector informático se mantuvo en la junta directiva de la compañía con sede en Redmond, a la sombra de quienes tomaban las decisiones: primero el estruendoso Steve Ballmer y después Satya Nadella, actual CEO de la firma.
Adiós definitivo
Fue en 2020 cuando Bill Gates decide comenzar una nueva etapa en su vida, así que se retira de la junta directiva --sigue teniendo acciones de la compañía--. No obstante, seguirá ejerciendo de asesor tecnológico de Nadella.
Y es que considera que es el momento de dedicarse al 100% a sus actividades relacionadas con la filantropía, por las que ha sido generador de un mayor número de noticias en los últimos años. No en vano, es una de las voces más autorizadas cuando se habla de cambio climático, de salud y vacunaciones e incluso de educación. Y aunque esto le ha generado numerosas opiniones enfrentadas, cada vez que ofrece su visión sobre temas como la actual pandemia, se tiene muy en cuenta.
Los fundadores de Google
Al igual que Bezos o Gates, Larry Page y Sergey Brin, cofundadores de Google, renunciaron en el año 2018 a sus funciones ejecutivas en la empresa matriz del famoso buscador, Alphabet. Después de dejar la compañía como uno de los grandes monstruos tecnológicos --líderes en el segmento de buscadores, de correo electrónico, de vídeos online…--, Page y Brin declararon que su papel en la compañía era el de “asumir el papel de padres orgullosos, ofreciendo consejos y amor, pero no regañando a diario”.
Quizás a todos ellos les inspiró Amancio Ortega cuando en 2017 decidió dejar todos sus cargos en la estructura de Inditex, al menos nominalmente. Aunque ya se sabe que Ortega siempre ha sido muy hermético con su vida privada y con sus proyectos más “personales”.