Si hace nada y menos Enrique Ponce estaba en boca de todo el mundo, por el supuesto altercado en un restaurante de Almería, ahora es su joven novia, Ana Soria, la que acapara toda la atención.
Y es que al parecer, la joven estudiante de Derecho habría sido insultada y abucheada en la plaza de toros de Granada, mientras su matador favorito se encontraba en plena faena. Un duro episodio que caló fondo en Soria hasta el punto de abandonar la plaza muy tocada. ¿Cómo te quedas?
Ana Soria, insultada
Según el programa Socialité, presentado por Maria Patiño, Ana Soria habría sido insultada y abucheada el pasado sábado 26 de septiembre a su paso por la plaza de toros de Granada, donde se trasladó para apoyar a su chico, Enrique Ponce, quien la volvió a sorprender, entre otras cosas, dibujando la letra A en la arena de la plaza. Unos ataques del público que se habrían producido para recriminar a la de Almería su actitud con Paloma Cuevas.
Y es que muchos consideran que la joven es la principal culpable del gran sufrimiento que tiene la empresaria. Aunque la cosa no termina aquí, sino que, según Socialité, los espectadores también se encararon a Ana Soria por no mantener la distancia de seguridad recomendada con una de las personas que estaba con ella mientras Ponce toreaba. Con todo, unos ataques que removieron a la joven quien optó por abandonar la plaza muy disgustada. Eso sí, antes de hacerlo, al parecer, se encaró con todos aquellos que se pusieron con ella. ¿Volverá Ana Soria a acompañar a Enrique Ponce en las plazas de toros? ¿O tras lo ocurrido se quedará en casa?
Ana Soria, responde
La información difundida por el programa de María Patiño no ha hecho nada de gracia a la joven de Almería, quien no ha dudado en dar su versión de los hechos a través de las redes sociales. "Ayer me fui de la plaza de toros de Granada porque me encontraba mareada, y decidió salirme. Todo lo demás es completamente inventado". De esta manera Ana Soria desmiente tajantemente que absolutamente nadie del público la insultara y abucheara.
De hecho, reconoce que se sintió mejor que nunca en las gradas porque "la gente se mostró más cariñosa conmigo". Una jornada taurina que la joven seguro tarda mucho en olvidar, y que preocupó a sus más allegados y seguidores. "Gracias a todos los que os habéis preocupado, pero ayer fue una tarde muy bonita y no hubo ningún tipo de altercado".