Dakota y Chelo, Chelo y Dakota. Ellas eran las dos concursantes que se batían en duelo para saber quien de las dos seguía como concursante y quien abandonaba la isla. Finalmente, el público se ha decantado por la exconcursante de Hermano Mayor, dejando a la colaboradora de Sálvame fuera de la isla. "Estoy triste porque pensaba que lo estaba haciendo bien, pero en algo he fallado para que la audiencia diga que me vaya", ha dicho Chelo tras conocer el veredicto de la audiencia.
Una decisión que ha dejado tocada y hundida a Isabel Pantoja: "Estoy fatal en estos momentos porque he pedido irme porque lo necesito y ella lo está haciendo divinamente. Me parece muy injusto y es lo que siento. Me cambiaba ahora mismo por Chelo". Aunque la tonadillera no ha sido la única que le ha querido dedicar unas palabras a la periodista. Y es que Lara Álvarez no se ha podido morder la lengua ante su marcha: "Chelo es un ejemplo de supervivencia desde el primer momento y ha demostrado ser una superviviente excelente".
Chelo e Isabel, juntas de nuevo después de siete años
Si por algo les ha servido el concurso a Chelo García Cortés y a Isabel Pantoja, más allá de aprender técnicas de supervivencia, ha sido para volver a reencontrarse y limar asperezas, tras siete años separadas. Y es que en el pasado ambas fueron muy amigas y compartieron momentos de lo más cómplices. Una situación por la que, aprovechando la expulsión de Chelo y el derrumbe de Isabel Pantoja, el presentador de la gala, Jorge Javier Vázquez, no ha podido evitar preguntar.
"Al principio el reencuentro fue frío pero, día a día, he ido recuperando a esa amiga que ha estado conmigo durante 30 años o más. He olvidado los momentos difíciles que pasé y Chelo ha sido un gran apoyo para mi en el concurso". Unas palabras que han emocionado, y mucho, a la periodista y a las que ha contestado de la siguiente forma: "El concurso me ha servido para reencontrarme con una de las personas que más quiero, que es Isabel. Somos y seremos siempre amigas." Después de dedicarse tan emotivas palabras, ¿se convertirán en las nuevas reinas de la noche madrileña cerrando todos los bares y discotecas? La cosa promete.