Emilio Cuatrecasas vende su ático de lujo en Barcelona

El abogado Emilio Cuatrecasas ha puesto a la venta su exclusivo ático de Barcelona, una auténtica joya inmobiliaria por la que pide 12 millones de euros. Situado en pleno Paseo de Gracia, a la altura de la calle Roselló, la vivienda consta de 572 metros cuadrados y una espectacular terraza de 128 metros cuadrados que rodea esta exclusiva propiedad.

El edificio en el que se encuentra fue construido por el arquitecto Carles Ferreter en 2006, y cuenta con una de las mejores vistas de la ciudad. De hecho, desde la terraza se pueden observar los dos emblemas más característicos de Gaudí: la Sagrada Familia y La Pedrera. Una propiedad que Emilio Cuatrecasas adquirió un año después de su inauguración, en 2007, tras separarse de su mujer, la doctora Mercedes Barceló.

El ático más caro de Barcelona

Según publica el diario Expansión, Emilio Cuatrecasas ha contactado con la inmobiliaria Sotheby’s International Realty para vender su exclusivo inmueble por 12 millones de euros. Un precio que lo sitúa como "el ático más caro a la venta de Barcelona", a 17.143 euros el metro cuadrado. 

Emilio Cuatrecasas, presidente de honor del bufete Cuatrecasas / CG

Este impresionante apartamento cuenta con tres salones, un gran comedor y una espaciosa cocina abierta que conecta con una segunda vivienda, pensada para el personal de servicio. Un espacio que tiene todo lo necesario: su propio dormitorio, un baño y acceso directo al ascensor.

Un lujo con todo tipo de detalle

El ático incluye un dormitorio principal con baño privado y vestidor, además de tres habitaciones más con sus respectivos baños. También hay un aseo para invitados en el pasillo, y existe la posibilidad de adaptar uno de los tres salones de lujo como quinto dormitorio.

Del mismo modo, la vivienda viene con cinco plazas de aparcamiento incluidas en el mismo edificio y tres trasteros. Un auténtico lujo barcelonés que, según el director adjunto de la inmobiliaria, Bojan Mujcin, Emilio Cuatrecasas ha decidido vender porque "no pasa tiempo allí" 14 años después de adquirirlo. Eso sí, no lo tendrá nada fácil: el inmueble lleva casi dos meses en el mercado y aún no ha recibido ninguna visita, como suele ocurrir con los lentos procesos de venta de las viviendas de superlujo.