Cataluña es uno de los territorios más ricos y diversos de todo el territorio español. Tiene una tradición artística y literaria especialmente potente, además de tratarse de una región vibrante y diversa, con una historia, cultura y economía variadas. Es un lugar fascinante para visitar, disfrutar y conocer la cultura y su gente.
Uno de los puntos más importantes, sin duda, es el idioma. En Cataluña conviven el castellano y el catalán, ambas lenguas oficiales del Estado. Toda la cultura gira en torno a ello y, una forma de integrarse, es tratar de hablar en catalán.
Hablarlo es una de las formas más socialmente aceptadas, pero debes tener cuidado con algunas palabras en concreto. En cualquier caso, no se duda de la libertad individual para hacer o decir lo que se quiera. Solo faltaría. Además, los catalanes destacan por su simpatía: lo máximo que podría pasar es que se diera una situación graciosa.
Esto es lo que no debes decir si vienes a Cataluña
En esta ocasión, en concreto, te traemos la palabra ‘brutejar’. En su definición, encontramos que es un verbo que dice “ser o mostrarse sucio”. En catalán, esto sería: “ser o mostrar-se brut”. No es lo mismo ‘brut’ que ‘brutejar’. Es decir, no es lo mismo sucio que ser o mostrarse sucio.
Otras expresiones catalanas que pueden crear confusión
En el catalán, tenemos un sinfín de expresiones que tienen un significado que no tiene nada que ver con su traducción al castellano o que dependen mucho del contexto. Te traemos algunos ejemplos muy claros:
- Pixapins: término que utiliza la gente de fuera de Barcelona para referirse a los barceloneses de forma despectiva cuando salen de la ciudad. Su definición popular es la siguiente: “Persona de ciudad que acude al campo los fines de semana o en vacaciones”.
- “Les coses clares i la xocolata espessa”: “Las cosas claras y el chocolate espeso”, una expresión en la que nos referimos a que tenemos que ser claros y sinceros con las afirmaciones.
- Rauxa: su definición vendría a ser “actuar por impulso, de forma irracional”. Es todo lo contrario a “seny”, que hace referencia a la sensatez.
- Déu n'hi do: se trata de una de las coletillas más extendidas entre la población catalana y viene a ser algo así como “Hay que ver”. Denota sorpresa o admiración por algo o alguien. La traducción literal al castellano sería: “Dios le dé”.
- Bufar i fer ampolles: expresión que se usa para argumentar que una tarea es sencilla de hacer y su traducción al pie de la letra sería “Soplar y hacer botellas”.
- “Fer el préssec”: “Hacer el melocotón”, que vendría a ser algo así como “hacer el primo” en castellano.
- Bocamoll: esta palabra se usa para definir a alguien que habla de más y suele equivocarse al hacerlo. La expresión castellana que más se acerca a la definición sería, por ejemplo, bocazas.
- “Tenir pebrots”: “Tener pimientos”, que habla de la valentía a la hora de hacer o decir algo.
- “Tallar el bacallà”: “Cortar el bacalao”, que hace referencia a la autoridad de una determinada persona en un determinado contexto.
- “Qui vulgui peix, que es mulli el cul”: “Quien quiera pez, que se moje el culo”, que podría asociarse a “quien algo quiere, algo le cuesta” en castellano.
- “Qui matina fa farina”: “Quien madruga, hace harina”, que podría asociarse como “a quien madruga, Dios le ayuda” tan típico en el refranero español.