La población catalana se enveje, como la del resto de España. La caída de natalidad y las mejores condiciones de vida hacen que la gente viva más, la pirámide poblacional quede apoyada por las personas mayores de 45 y la juventud quede en desventaja. Pero siempre hay excepciones.
La Pobla de Mafumet es como un oasis en Cataluña. Un municipio en el que los jóvenes tienen cada vez más peso y equilibran la media de edad. Si en Cataluña la media de edad es de 42 años, en esta localidad se queda en los 33.
Los datos y su explicación
El interrogante es obvio: ¿Cuáles son los factores que han propiciado esta característica demográfica? En gran medida, el aumento de la población registrado en los últimos años ha contribuido a esta juventud.
En 2019, la población superó los 4.000 habitantes, un crecimiento significativo desde los 968 residentes en 1995. Este incremento se atribuye a las buenas comunicaciones y la calidad de vida que ofrece el municipio, atrayendo a familias con niños y jóvenes en busca de oportunidades laborales y un entorno tranquilo para vivir.
Industria e historia
La Pobla de Mafumet combina su rico pasado agrícola con un presente industrial, marcado especialmente por la construcción de una refinería de petróleo en 1974. Otro factor que ha ayudado a atraer población.
A nivel turístico, su casco antiguo es un reflejo de su historia, con edificaciones notables que abarcan desde el siglo XV hasta el siglo XX. Uno de sus principales atractivos es la iglesia barroca de San Juan el Bautista, con su imponente campanario coronado por una cúpula. En su interior se encuentra la imagen románica de la Mare de Déu del Lledó, patrona de la población, una talla de gran valor histórico y religioso.
Qué ver
La Casa Balei destaca entre las construcciones singulares del municipio, con su peculiar revestimiento de mosaico que la ha convertido en un emblema local. Además, La Pobla de Mafumet ofrece un calendario festivo animado, con celebraciones tradicionales y religiosas, como la festividad de Nuestra Señora de Lledó, que reflejan la identidad y la cultura del pueblo.
El municipio también puede ser un gran lugar de base para conocer los encantos del Tarragonès. A menos de 10 kilómetros está la vieja Tarraco y los encantadores pueblos de la Costa Dorada. También hay posibilidad de diversión sin límites por su cercanía a Port Aventura y el parque acuático de Waterworld.
Cómo llegar
Para aquellos que deseen visitar este particular municipio, existen diversas rutas desde ciudades cercanas que conectan con la Pobla. La más cercana es Tarragona, a la que está unida por la A-27 y en 12 minutos uno llega al centro.
Desde Barcelona y Girona, antes se ha de ir por la AP-7 y salir en dirección Tarragona y desviarse por la AP-27. Desde Lleida se ha de ir por la AP-2 hasta la salida de Valls y allí.