Ahorrar agua es una práctica esencial dada la importancia de la gestión sostenible de los recursos hídricos, especialmente, en regiones donde la disponibilidad del agua puede verse afectada por factores como la sequía y el cambio climático. Te presentamos algunos consejos para fomentar el ahorro de agua.
- Mejor ducharse en vez de bañarse: Se ahorra más ya que se gasta 15 veces más de agua que en la ducha.
- Cierra el grifo mientras te lavas los dientes, te afeitas, te enjabonas las manos o friegas los platos. Son pequeños actos que pueden hacer que ahorres mucha agua, más de la que te imaginas.
- El inodoro no es una papelera: Cada vez que tiramos de la cadena gastamos entre nueve y diez litros para arrastrar un triste papelito. Mucho mejor comprar una pequeña papelera y ponerla en el lavabo.
- Evita perder agua del grifo: Muchos grifos gotean y pueden llegar a gastar en un año 11.000 litros de agua. Y las fugas en la cisterna del inodoro pueden suponer pérdidas de más de 100 litros de agua al día. ¡Quién lo diría!
- Llena hasta arriba la lavadora y el lavavajillas: Con esto ahorrarás además de agua, electricidad. El consumo de agua en la colada suele ser el 20% de nuestro consumo total en el hogar. Es mejor que siempre que puedas no utilices el programa de prelavado. Y si tienes la costumbre de pasar agua a los platos antes de meterlos en el lavavajillas no lo hagas, así podrás ahorrar más agua.
- Usa reductores de caudal o aireadores en los grifos: Estos son dispositivos que se pueden incorporar a la grifería o a la ducha e impiden que el caudal supere el límite fijado. Lo aconsejable para grifos son ocho litros por minuto y para ducha diez litros por minuto. Los aireadores permiten introducir aire en el chorro de agua, consiguiendo un ahorro del 40% o del 50%.
- Riega las plantas por la noche: Es mejor que lo hagas por la noche ya que al regar por el día puedes perder hasta el 30% debido a la evaporación.
- Lava el coche sin agua: Se puede lavar en seco y en el mercado existen limpiadores biodegradables para limpiar los vehículos que no contaminan con detergentes tóxicos. Para ello, hay que pulverizar el producto sobre la superficie del coche, para que salga toda la suciedad, frotar y limpiar con una bayeta. ¡Así de fácil!
- Usa el mismo vaso de agua todo el día: Es decir, no estamos diciendo que seáis sucios sino que no es necesario lavarlo cada día después de cada uso; una vez por jornada es suficiente.
- Cocina los alimentos al vapor: Para cocinarlos al vapor solo es necesario llenar un poco el cazo, ya que se ahorra bastante más agua y, además, mejorarás los nutrientes de los alimentos.