La obra de Salvador Dalí es de sobra conocida. Su legado cruzó fronteras y es uno de los artistas más importantes del siglo XX y de toda la historia. Nacido en Figueres, este pintor, escultor, grabador, escenógrafo y escritor fue uno de los representantes del surrealismo en España más relevantes.
En las próximas líneas explicaremos una de esas historias curiosas que esconden su figura y que no es tan conocida popularmente. Tiene que ver con la famosa marca de caramelos, Chupa Chups, de la cual rediseñó su marca a finales de los años 60.
¿Por qué Enric Bernat, fundador de la marca, apostó por Dalí para hacer el rediseño? ¿Cuál fue la aportación real del artista? ¿Cómo se fraguó?
Así ayudó Salvador Dalí a Chupa Chups en el rediseño de la marca
El principal rediseño del logotipo de Chupa Chups fue obra de Salvador Dalí. En 1969, cuando la empresa de Enric Bernat hizo un intento por expandir la marca, buscó la ayuda del artista catalán, que accedió a ello por una tarifa millonaria.
Cuentan que Dalí solo tardó una hora en realizar el diseño y, aunque parezca lo contrario, la influencia fue importante. Introdujo el uso de color rojo sobre fondo amarillo en un movimiento bastante inteligente. También introdujo uno de los elementos más fuertes de la identidad de Chupa Chups: la forma de flor que envuelve al logotipo. Y, por último, colocó el logotipo en la parte superior del envoltorio, favoreciendo así su visibilidad y personalidad propia.
Origen e historia del Chupa Chups
El caramelo con palo surgió alrededor de los años 50. En aquellos años, los niños eran muy dados a ensuciarse las manos con los caramelos y Enric Bernat, entonces a los mandos de Granja Asturias, tuvo la idea de diseñar un caramelo con palo para evitar precisamente eso. Y, pese a no contar con el apoyo de sus socios, puso en marcha el mecanismo de forma solitaria y en 1959 patentó la idea para evitar a competidores.
En principio, el producto catalán debía llamarse Gol, puesto que tenía una forma esférica y la boca vendría a ser algo así como una portería, pero lo cierto es que no tuvo demasiado éxito y fue, a través de una empresa de publicidad en Barcelona, cuando se apostó por 'Chups'. Este nombre tuvo algo más de aceptación, especialmente a través del anuncio de “¡Chupa un dulce caramelo, chupa, chupa, chupa Chups!” en la radio.