El pueblo de Lleida con menos de 200 habitantes que esconde el castillo templario más antiguo de Cataluña

Conocer pueblos o visitar castillos es uno de los temas de los que más nos gusta hablar en Crónica Directo, pero si ya englobamos los dos en el mismo artículo seguro que tu día será un poco mejor que el anterior. Más informado, más entretenido y más actualizado. Así que hoy es día de hablarte de un pueblo con un precioso castillo templario. 

Grañena o Grañena de Cervera o Grañena de Segarra (lo puedes decir de las tres formas) es un pueblo que se encuentra en la provincia de Lleida. Su núcleo urbano está situado al pie de las ruinas del castillo templario de Grañena. Cuenta con una población de 142 habitantes, con una superficie de 16,3km2 y una densidad de km2. Y la media de edad de los hombres, que viven allí, rondan los 76 años y la de la mujer, los 66 años. 

Si entramos a investigar los datos de paro del municipio, Grañena terminó diciembre de 2023 con un incremento en las cifras de desempleo. Asciende a siete personas que, actualmente, se encuentran sin trabajo en la localidad, según el Idescat.

Las dos joyas de Grañena

Uno de los lugares más visitables de este pequeño pueblo es el castillo templario, de los siglos XI y XII. Fue la primera edificación en Cataluña de la orden del Temple. Actualmente, se halla casi en ruinas, aunque conserva gran parte de los espacios; incluidos los pasadizos y las imponentes paredes que se mantienen en pie en la cima de la villa. 

Castillo de Grañena visit.somsegarra.cat

Éste fue el segundo conjunto fortificado del área, ya que a medio kilómetro al sur del pueblo se encuentran las ruinas de una torre cilíndrica que funcionó como punto de vigilancia o defensa en los siglos XI y parte del XII. Además, cerca del castillo, en el antiguo cementerio, ahora transformado en una plaza, se encuentra una capilla.

Castillo de Grañena visit.somsegarra.cat

El segundo lugar de interés imprescindible para ver es la ermita de Santa María del Camino. Es un imponente edificio neoclásico y uno de los más grandes e interesantes de la Segarra. Es una iglesia construida a finales del siglo XVIII, que cuenta con tres naves y un majestuoso campanario que define la silueta del pueblo. Junto a la capilla había un antiguo monasterio que fundó la abadesa Emma de Sant Joan de les Abadesses en 921 para su hermana Xixilona y en el marco de la política repobladora que la caracterizó. Ambas eran hijas del conde Wifredo el Velloso. ¿Vendrías a visitar este pueblo?