El pueblo de Lleida donde una casa de 154 m2 cuesta 8.000 euros: acceso privado en un entorno idílico
Desde los romanos hasta el siglo XXI este municipio ha crecido lo justo para tener tranquilidad sin estar aislado del mundo
27 diciembre, 2023 09:58Noticias relacionadas
Vivir en un pueblo de tan sólo 752 habitantes es un sueño para muchos urbanitas. Es el tamaño perfecto entre una aldea solitaria y demasiada gente con la que cruzarse. Por eso, una vida en la Granadella se convierte en una opción para muchos.
Situado en la provincia de Lleida, el origen de este municipio se remonta a la época del Imperio romano. Pero, como suele pasar en Cataluña, el mayor auge lo tuvo durante la Edad Media.
Desde el castillo al núcleo urbano
La Granadella creció entre dos crestas de las montañas de Les Garrigues. A partir de un castillo que estaba situado en una de las cimas, la construcción de viviendas empezó a hacerse un poco más abajo, alrededor de un antiguo crucifijo del siglo XIV, que luego se convirtió en iglesia de Santa María de Gracia.
Todas las calles, que nacieron de forma algo desordenado tiene, en cambio, un centro, el del templo religioso. Allí donde está la fuente que en su día abastecía a sus habitantes y que desde hace unos años no mana ni una gota de agua.
Una ganga inmobiliaria
Sus calles no son empedradas, pero rezuman encanto. Por eso, encontrar una casa de 154 metros cuadrados por 8.000 euros supone toda una ganga en los tiempos que corren.
Como bien habrán deducido muchos, se ha de renovar, pero esa reforma puede dar mucho de sí. Tiene varias estancias que se han de acomodar y un acceso privado a través de la C-242 y C-233, podrá desplazarse con facilidad a poblaciones cercanas.
Ubicación ideal
Su situación en el municipio también es ideal. La zona está dotada de los servicios necesarios más fundamentales para llevar una vida práctica: supermercados, restaurantes, comercios. Poco más se puede pedir.
Aun así, la Granadella lo da. El entorno es ideal para los amantes de la naturaleza y el buen vino. Las tierras del Montsant, donde los vinos tienen su propia denominación de origen está a tiro de piedra, lo mismo que el Priorat.
Cómo llegar
La conexión con el resto de capitales catalanas, a excepción de Girona es muy buena. Está a media hora de Lleida por la C-32 o a una hora y 20 minutos de Tarragona por la AP-2 y a media hora más de Barcelona por la misma carretera.
Vivir en la Granadella, en definitiva, es una opción ideal para aquellos que quieran desconectar del trajín de la ciudad y conectar con la naturaleza y, a su vez, tener a las urbes a poco tiempo en coche. Un plan perfecto.