Llega la Navidad y no todo son mercados navideños, pesebres y poblados. Hay lugares en Cataluña que, originalmente, parecen sacados de una postal navideña y que hacen pensar que el mismísimo Papá Noel estaría encantado de pasar una noche allí.
Uno de estos espacios se esconde en el Parque Natural de las Montañas de Prades, donde emerge un rincón encantador que se convierte en la escapada perfecta para estas fechas. Allí, en medio de estas montañas de Tarragona se encuentran las casas rurales El Xalet de Prades.
Calidez y naturaleza
Rodeadas por el excepcional entorno natural del parque este aparthotel invita a descubrir rutas pintorescas y pueblos llenos de historia y encanto. Para los menos aventureros también ofrece un espacio de relax, cálido, donde disfrutar del entorno desde las instalaciones.
Cada rincón de este lugar ha sido cuidadosamente pensado para ofrecer una experiencia única en medio de la naturaleza catalana, proporcionando una escapada navideña que destila serenidad y encanto.
Habitaciones especiales, noches estrelladas
Por lo que respecta a las opciones de alojamiento las hay para todos los gustos: desde acogedoras cabañas de madera en los árboles hasta casas de madera que respiran calidez, pasando por singulares iglús diseñados para contemplar las estrellas.
La certificación Starlight garantiza noches estrelladas inolvidables, convirtiendo cada instante en una oportunidad para compartir momentos preciosos con familia, pareja o amigos.
Relax y excursiones
A pesar de ser un aparthotel, en el que uno puede hacer lo que quiera con la comida, el alojamiento cuenta con un encantador restaurante. A esto, se le añaden una serie de servicios como una piscina para los meses cálidos, un spa para relajarse y zonas comunes llenas de entretenimiento. Todo sin contar con una granja que le da el toque rural que tanto agrada a los de ciudad.
Para aquellos que buscan más allá de la calma y el relax, los alrededores ofrecen un abanico de actividades emocionantes como rutas de senderismo, escalada, multiaventura y paseos en bicicleta.
Entorno de lujo
Si uno es más de coger el coche y conocer el territorio, los tesoros culturales de la región, como el monasterio de Poblet y el encantador pueblo de Siurana de Prades, son destinos que enriquecen la experiencia. Asimismo, una ruta por las bodegas locales promete sumergir a los visitantes en la riqueza del mundo vinícola catalán.
En definitiva, este refugio se erige como el lugar ideal para aquellos que buscan una Navidad distinta, donde la magia de la temporada se encuentra en cada detalle y la conexión con la naturaleza catalana se convierte en un regalo inolvidable. Y quién sabe, igual hasta se aparece por allí Papá Noel.