Parece imposible teniendo en cuenta que este viernes ha amanecido frío, pero Cataluña se prepara para un fin de semana radiante y cálido que invita a disfrutar del sol y el buen tiempo. Una vez más.
Según las detalladas previsiones del Servei Meteorològic de Catalunya (Meteocat), parece que el veranillo de San Martín se resiste a irse. Este 18 y 19 de noviembre los catalanes vuelven a experimentar un notorio ascenso de las temperaturas.
Nubes previas al calor
Después de una semana que comenzó con valores récord, este viernes marca un descenso en picado de los termómetros e incluso chubascos en algunos puntos del territorio. Sin embargo, este agua tan necesaria se irá tan pronto como ha llegado.
El sábado el mercurio inicia una tendencia al alza, con la posibilidad de algunas nubes matinales, especialmente en la franja litoral y, en particular, en la costa de Barcelona. A medida que avance el día, el sol ganará terreno, ofreciendo condiciones ideales para actividades al aire libre.
Domingo cálido
Pero la verdadera subida de las temperaturas se espera el domingo, cuando se podrían alcanzar valores que superen los 25 grados. Este ambiente cálido se verá afectado momentáneamente por nieblas en el interior de Cataluña, especialmente en la zona central, aunque se espera que estas se disipen rápidamente, dando paso a un día soleado y templado.
Este breve oasis de calor no hace más que dejarnos un tiempo suave, una climatología agradable, poco propia de un mes de noviembre, pero sin niveles récord. El mayor problema, en cualquier caso, es que la lluvia no llega.
¿Y las lluvias?
Las esperanzas de que las precipitaciones puedan mejorar la situación son débiles. Si bien es cierto que el lunes se prevé un cambio en las condiciones meteorológicas, pueden resultar insuficientes.
Las lluvias, tan esperadas, harán su regreso, pero no se esperan que sean grandes precipitaciones ni que se extiendan más allá del lunes. Lo que sí va a imponerse es el frío. Será un recordatorio de que el otoño está en pleno apogeo y que el invierno está a la vuelta de la esquina, aunque el fin de semana no lo parezca.