El edificio de Gaudí más desconocido de Cataluña

Gaudí no se acaba en Barcelona. Tampoco en Cantabria. A la entrada de los Pirineos también hay un edificio que, a pesar de no ser típicamente gaudiniano, conserva la esencia del arquitecto de Reus.

Situada a 1.500 metros, en medio de la sierra del Catllaràs, en el término municipal de La Pobla de Lillet, se sitúa el Chalet del Catllaràs. Una obra que bebe mucho del espíritu fabril de la época y que tiene mucha relación con la familia mecenas del arquitecto, los Güell.

La familia 

En esa zona había unas minas de carbón que se usaban en la fábrica de cemento Asland de Castellar de n’Hug. Esa factoría pertenecía a los Güell. Ellos encargaron un proyecto a Gaudí que sirviera de residencia a los ingenieros que trabajaban en las minas de la zona.

Fue dicho y hecho. En 1902 se inició la construcción de este edificio que, con el paso del tiempo, ha perdido su uso original y que más allá de la forma de parábola que tiene, sus curvas, dista mucho de otras obras del adalid del modernismo. El tejado, por ejemplo, es el típico de montaña hecho de con pizarra.

Chalet de Catllaràs TURISME DE LA POBLA DE LILLET

Rasgos modernistas 

Los detalles gaudinianos son menores, pero allí están. El edificio está lleno de ventanas para dejar entrar la luz natural, aunque estas son más cuadradas que alargadas. También se puede ver una escalera redondeada de caracol con salidas cuadradas, pero son más típicas de la Casa Amatller de Puig y Cadafalch, que del Gaudí de La Pedrera.

Lo curioso de todo es que, si bien la arquitectura gaudiniana se trata de cuidar con mucho cuidado, el Chalet del Catllaràs se dejó morir. Varias veces. Pasó a manos del ayuntamiento de la Pobla en los años 30, pero en los 70 ya estaba completamente en ruinas.

Abandono máximo 

Escolares de colonias fueron los habitantes principales de esta casa hasta hace una década. La Fundació Pere Tarrés la usó para eso. Pero acabó en completo desuso, cuando no maltrecha. La pintura blanca quedó deslucida, los trastos del agua y la nieve lloraban en sus paredes, manchándola.

No fue hasta 2018, gracias a que la Diputación de Barcelona y la Generalitat lo calificaron Bien de Interés Cultural, pero sobre todo a los fondos europeos Feder que no se ha restaurado como la casa merece. Claro que ya buscan quién se pueda hacer responsable de este refugio.

Chalet de Catllaràs WIKIPEDIA

En el olvido 

Mientras esto sucede, la Cátedra Gaudí empieza a poner en duda la autoría de Gaudí. Las sospechas molestan al consistorio y la Administración que bien claros rasgos gaudinianos en la casa. Además, cerca de allí hay otra prueba del paso del de Reus por la zona.

Durante la construcción, el arquitecto se alojó en casa de la familia Artigas y, en agradecimiento, les diseñó la renovación del jardín. Los dueños de la casa la abandonaron en los 50 y tuvo que ser el ayuntamiento quien saliera en su rescate. Dos joyas ignoradas que no reciben el trato que merecen.

Pobla de l'Illet