Picasso, reconocido pintor y escultor malagueño, tuvo una relación con Cataluña desde pequeño ya que estudió en la Escuela de Bellas Artes de Barcelona. También, fue donde también conoció a Dalí en la primera exposición de este en la Galería Dalmau, y en 1957, empezó a trabajar en una serie de 58 interpretaciones sobre Las Meninas.
Picasso quedó tan impresionado con Horta de Sant Joan, en Tarragona, y sus parajes que convirtió la zona en una de sus principales fuentes de inspiración. Dijo que todo lo que sabía, lo había aprendido en este pueblo y estas palabras supusieron una plataforma de lanzamiento impagable para este pequeño municipio ubicado en la Terra Alta.
Ruta de arte y cultura
En este pueblo encontramos el Centro Picasso, el principal encargado de mostrar y difundir los legados de esa relación tan especial que se estableció entre Picasso y el municipio tarraconense. El centro cuenta con una exposición permanente en edición facsímil de todas las obras que Picasso pintó en esta tierra, así como de aquellas otras que también tuvieron su origen en este paraje. Acompañan las reproducciones los testigos directos en forma de imágenes, objetos o textos que el artista dedicó a Horta de Sant Joan y a su gente.
Picasso permaneció en Horta de Sant Joan durante dos etapas: la primera de ellas, de nueve meses, fue de 1898 a 1899. Al cabo de diez años, Picasso decidió volver al lugar que tan buenos recuerdos le traían y, en esta ocasión, lo hizo acompañado de Fernande Olivier, musa e inspiración de gran parte de las obras que protagonizaron el inicio de su etapa cubista.
Otra visita obligada es el Mas d'en Quiquet, donde el joven Pablo y su amigo se refugiaron algunas de esas noches, así como el Mas de Tafetans, casa de la familia Pallarès. Todos estos parajes naturales y edificaciones, la vida rural en el campo y los paisajes de la Terra Alta encontraron un lugar destacado en muchas de las primeras pinturas del artista adolescente; en las que la representación de campesinos, pastores o leñadores, eran frecuentes y dieron fe de la intensa huella que este lugar dejó en la obra del pintor.