Bajo tierra, un tesoro reconocido: la fascinante cueva de Cataluña que ostenta el título de Patrimonio de la Humanidad
Este yacimiento arqueológico rupestre fue un lugar mágico para los íberos y los romanos
19 diciembre, 2023 18:40Noticias relacionadas
El Día Europeo del Arte Rupestre (el 9 de octubre) se celebra en homenaje al 117 aniversario del reconocimiento efectuado por la comunidad científica internacional, acerca de la autenticidad del arte de la cueva de Altamira.
Esta efeméride ha sido proclamada por el Consejo Europeo y la Comisión Europea, a petición de la Asociación Europea Caminos de Arte Rupestre Prehistórico (Prehistoric Rock Art Trails), formando parte de los Días Europeos del Patrimonio (European Heritage Days).
De hecho hay otros 14 lugares, además de este, que son Patrimonio de la Humanidad en Cataluña como La Pedrera, el Hospital de Sant Pau o el Monestir de Poblet.
De acuerdo con investigaciones recientes, el arte rupestre data desde hace unos 42.000 años en Europa. A partir del año 1976 se han clasificado 11 yacimientos de arte rupestre en el continente europeo, como Patrimonio de la Humanidad. Por otra parte, se han abierto al público unos 250 sitios de arte rupestre, en los países miembros del Consejo Europeo.
Yacimiento arqueológico
Hoy descatamos, La Roca Dels Moros o cuevas de El Cogul, uno de los yacimientos de pinturas rupestres más destacados del arte rupestre levantino, que tuvo su zona de influencia durante el Neolítico por todo el levante de la península ibérica. Las cuevas, se encuentran Las Garrigas, en Lleida, y se cree que después fue un santuario o un lugar mágico para los íberos y los romanos.
Fueron descubiertas por el rector del pueblo, Ramón Huguet, en 1908, y descritas por Ceferí Rocafort. Otra edición más amplia fue publicada por Juan Cabré en El arte rupestre en España (1915). Las pinturas de la Roca Dels Moros han sido declaradas por la Unesco, Patrimonio de la Humanidad.
En el Cogul se encuentra esta cavidad que fue habitada por seres humanos hace unos 5.000 años y que está considerada uno de los principales conjuntos arqueológicos de toda la Península Ibérica. Y no es de extrañar si se tiene en cuenta que hay 42 figuras pintadas, además de 260 elementos grabados en la roca.
Destaca por representar varias épocas: desde las pinturas con motivos cazadores y recolectores realizadas hace entre 8.000 y 5.000 años, hasta las que efectuaron los grupos neolíticos posteriormente, en las que se observa una esquematización que supone una evolución en la forma de expresarse.