Por mucho que en las redes se empeñen en decir que la cocina catalana es la peor de España, todos sabemos que hay gente que habla sin saber. Claro que también es cierto que los catalanes se guardan algunas cosas para sí y hay un postre que, por ejemplo, no dejan que salga mucho en sus guías.

Obviamente no hablamos ni de los panellets, ni de la crema catalana ni del mel i mató. Se trata de un dulce muy tradicional y que tampoco está tan extendido por toda Cataluña. Hay catalanes que incluso lo desconocen.

El origen

Se trata de las catanias. A pesar de que su nombre suene a siciliano, este postre no tiene nada que ver con Italia, más bien con la tierra del vino y del cava, Vilafranca del Penedés.

Para los que no sepan qué es, aquí un resumen rápido. Una catania es una almendra entera caramelizada, cubierta de una base de chocolate blanco y un espolvoreado de cacao. Una delicia ideal para el café.

Catanias BOMBONERÍA SANTA GEMMA

Un nombre particular

Esta exquisita creación surge de las manos de un maestro chocolatero, Joan Treus i Ribas, con una tendencia a la experimentación. Corría el año 1877 cuando, en su obrador, empezó a experimentar y dio con esta combinación perfecta.

El nombre original no sonaba tan italiano, pero tampoco tenía tanto gancho. Finalmente, como buen nieto, pensó en su abuela, Mercè Urgellés, para rebautizarla. La mujer era la pubilla, la hija pequeña, de cal Catani. Y de esos polvos, estos lodos.

Producto de lujo 

Que los haters de la gastronomía catalana no les confundan. Las catanias no son italianas, son 100% catalanas y no están muy extendidas. En Vilafranca se solían poner en el café o junto a esos dulces variados que se toman de postre.

Poco a poco, y pasado más de un siglo, las catanias han salido del Penedés. Hay empresas que las fabrica y comercializa incluso en aeropuertos, en la sección de productos gourmet. Porque sí, la almendra va cara y, por tanto, las catanias, se vendan en tiendas especializadas, pastelerías o tiendas de gominolas se venden a precio de lujo. Eso sí, digno de su increíble saber.