Cataluña despliega una riqueza natural cautivadora que merece ser explorada. Entre sus tesoros, emerge una maravilla poco conocida: la Montaña de Sal en Cardona, dentro de la provincia de Barcelona. Esta peculiaridad geológica, única en el planeta, aún crece debido a la erosión causada por las lluvias. En su interior, aguarda una mina de sal que invita a un fascinante viaje subterráneo, descendiendo a casi 100 metros bajo tierra.
Desde 1929 hasta los años 90, la Montaña de la Sal operó como la Mina Nieves de Cardona. En la actualidad, esta que fue una de las minas de sal potásica más relevantes a nivel global se ha transformado en un parque cultural, un espacio educativo que busca transmitir al público la relevancia de este mineral, así como la importancia de la geografía local y la explotación histórica que ha ocurrido en la zona.
La Montaña de Sal se yergue en la superficie como una imponente colina grisácea y escarpada, pero esto solo es la "punta del iceberg". Internamente, se despliega una red de túneles subterráneos que se extienden hasta dos kilómetros de longitud (aunque no se pueden recorrer en su totalidad).
Un descenso a 86 metros de profundidad
El Parque Cultural de la Montaña de Sal ofrece excursiones guiadas que nos permiten adentrarnos hasta 86 metros bajo tierra, brindándonos un auténtico espectáculo de formas, estratos, vetas y texturas en el corazón del macizo salino.
Por ejemplo, en el interior, los visitantes pueden contemplar la galería denominada Capilla Sixtina, nombre que le ha sido otorgado por su extraordinaria belleza y la diversidad de formas, colores y minerales que exhibe. Además, en este espacio se celebran diversos eventos, como cenas y conciertos en vivo.
En otro orden de ideas, los interesados también pueden explorar las antiguas instalaciones mineras. Se puede acceder al edificio que albergaba las máquinas del pozo minero, y sumergirse por completo en la historia industrial de la región a través de una exhibición museográfica que narra la historia de la explotación de las sales, la geología, la mineralogía y la botánica de este enclave.
Cómo llegar
El trayecto entre Barcelona y Cardona es de 1 hora y 20 minutos a través de la C-16 y la C-55. La Montaña de Sal se encuentra a tan solo un kilómetro del centro del pueblo y cuenta con un parking gratuito para los visitantes.