La trama de abusos y acoso a menores de Jeffrey Epstein tenía una base en Florida, Nueva York, Islas Vírgenes, Santa Fe (New Mexico) y París (Francia). Es por eso que, las tierras que poseía el magnate en el archipiélago ya se conocen como “isla de los pederastas”.
Se trata de la formación binaria Little y Great St James de 93 hectáreas, ubicadas entre las bahías de St Thomas y St John. Un paraíso que se convirtió en todo un infierno para las víctimas del millonario.
Precio de compra y venta
Desde que Epstein apareciera muerto en su celda en 2019, el pareje está intacto e inhabitado. Ahora, casi tres años después de su deceso ha salido a la venta por 114 millones de euros. Un valor mucho más elevado del que se pagó.
El estadounidense se hizo con Little St. James en 1998 por 7,24 millones de euros, y en 2016 hizo lo mismo con Great St. James, aunque tuvo que desembolsar 16 millones. Ahora, se venden por casi 100 millones más.
Condiciones
El millonario invirtió hasta su muerte mucho dinero en acondicionarla para vivir. Allí se construyó una enorme mansión con dos piscinas, cuatro villas, muelle, helipuerto y hasta una gasolinera para moverse.
Esta vivienda no es la única. En otro extremo de la isla hay un edificio que fue derribado por un huracán en 2017 y que era una sala de música con un piano de cola y paredes insonorizadas. Al menos, eso se le dijo a los empleados que trabajaban allí. Otros apuntan que habría sido el lugar para cometer los abusos a menores.
Mala fama
Los fiscales de las islas informaron en 2020 que Epstein había llevado allí a varias niñas, algunas de ellas de 11 años. Las trasladaron en yate y helicóptero privado para mayor discreción.
Este es otro de los bienes del magnate que ahora sale a la venta y que, según la agencia inmobiliaria tiene una increíble costa para disfrutar de todo tipo de actividades en el Caribe. Para muchos, ya sólo es “la isla de los pederastas”.