¿Sirve de algo salir a correr después de pegarse un atracón? Nacor Puig, entrenador personal y técnico de musculación por la escuela Orthos, resuelve a Crónica Directo la pregunta que año tras año se hacen miles de españoles tras los ágapes navideños.
Licenciado y con máster en Nutrición por la UOC, el experto, que cuenta con varios oros en carreras Ironman y Spartan race, recomienda evitar aquellos alimentos que no generan saciedad. En concreto, los dulces.
¿Salir a correr?
Y es que aunque son muchas las personas que antes o después de sentarse en la mesa a darse el atracón del siglo intentan expiar sus culpas atándose las bambas, el técnico es tajante: “Salir a correr para quemar los turrones es una solución poco recomendable que solo da resultado a corto plazo”.
De hecho, ante un escenario de estas características, el especialista sugiere resignarse y dar por hecho que ese día ha habido un superávit calórico, a la vez que aconseja retomar la rutina deportiva cuanto antes. Su favorita, la que contenga entrenamientos de fuerza.
Entrenamientos de fuerza
¿Qué se entiende por ello? Según Puig, todo entrenamiento en el que se le pide al músculo una contracción que como máximo dura entre 25 y 35 segundos. En definitiva, una sesión con pesas que al depletar las reservas de glucógeno del músculo, llega a generar una deuda energética que durará varias horas.
Si bien reconoce que la rutina ideal sería aquella que contemple la posibilidad de llevar a cabo entrenamientos de diferentes modalidades. Es decir, aquellos que, además de la fuerza, incluyen la ejercitación cardiovascular mediante sesiones combinadas que cumplen con el siguiente esquema: primero fuerza y después cardio.
Cambio de rutina: ¿Cuándo es aconsejable?
Asimismo, a todas las personas que como propósito de año nuevo decidan aventurarse en el mundo del deporte, les recomienda ponerse en manos de un especialista, así como mantener una rutina de como mínimo tres sesiones por semana de forma prolongada en el tiempo. En este sentido, remarca que tan solo es necesario cambiar de rutina "cuando se tiene sensación de estancamiento, de no progresar".
Y, ojo, porque nada es tan fácil como parece, ya que cambiar de entrenamiento requerirá un período de adaptación neuromuscular de varias semanas a los nuevos ejercicios. Es por ello que se deberá analizar al detalle cada caso.