Ikigai, el secreto japonés para encontrar la felicidad
La búsqueda de un propósito para levantarse cada día más que una meta es un camino a lo largo de la experiencia vital de cada uno
15 noviembre, 2021 23:32La felicidad, esa sensación tan ansiada como propósito y anhelo de vida que, en ocasiones, parece escaparse y no llegar de manera definitiva. Hasta ahora, ya que según la tradición milenaria japonesa el secreto para encontrar ese estado deseado se llama ikigai. Una palabra nipona que explicaría qué hay detrás de una existencia próspera, larga y sin atisbo de tristeza y que se forma de los conceptos iki que significa vida y gai que puede traducirse como valor desde un punto de vista más material.
Por ello, nada como seguir los preceptos japoneses en este camino vital y personal para que cada uno haga su propia reflexión acerca de las metas y propósitos que espera alcanzar con el paso de los años para lograr ese estado placentero y de bienestar completo. Algo de lo que ya se hablaba en el período Heian, la última etapa de la época clásica de la historia japonesa y que discurrió entre los años 794 a 1185. Por aquel entonces, el confucianismo y otras influencias alcanzaron su punto máximo y ya se ponía nombre a la búsqueda de la felicidad personal.
La razón de ser
A la hora de establecer una definición del concepto del ikigai, aparte de lo ya mencionado, también se puede hacer referencia a esa razón de ser o ese motivo por el que cada uno, en su fuero interno, decide levantarse cada día con el mejor de los ánimos y la mejor de las sonrisas. Así pues, como recuerdan los sabios del país nipón, si uno vive su vida en base a ese propósito u objetivo vital conseguirá estar más cerca de tener una existencia lo más plena y satisfactoria posible.
¿Y esto cómo se consigue? El ilkigai depende de cada persona, así como del concepto de felicidad que tenga cada uno o de aquello que le haga feliz. Así, mientras para algunas personas esa vida plena está en tener un trabajo que le apasione y por el que reciba un buen salario, para otras el secreto de la felicidad depende de otra serie de aspectos menos materiales y con los que se pueda encontrar un equilibrio para descubrir qué es lo verdaderamente importante en la vida. La decisión no es complicada: basta con saber elegir entre aquello que realmente hace feliz a cada uno.
Encontrar el ikigai
Sin embargo, si uno encuentra algo difícil discernir cuál es su propósito vital más importante, el ikigai puede ayudar en la decisión con la respuesta de cuatro preguntas sencillas. Un "cuestionario" para conocer qué motiva a cada persona en el recorrido por su vida. Cuestiones relativas a qué ama cada persona, en qué aspectos de la vida destaca positivamente (por ejemplo, si tiene una habilidad particular), descubriendo qué necesita el mundo y, finalmente, cómo conseguir que a uno le paguen por ello. De la combinación de estas cuatro cuestiones es de donde sale ese ikigai.
Sin embargo, no se debe olvidar que esta creencia japonesa hace mención a un camino, no a un destino o meta. De ahí que sea necesario tener presente que ese objetivo para ser feliz puede que cambie y evolucione con el tiempo; y es que, como es lógico, no se desea lo mismo con 20 años que cuando se ha superado la cuarentena y las preocupaciones e intereses importantes en la vida son otros.
El pueblo centenario
No se puede hablar del ikigai sin hacer mención a un libro homónimo escrito por dos españoles: Héctor López, un ingeniero residente en el país del Sol Naciente, y el periodista Francesc Miralles. En Ikigai, los secretos de Japón para una vida larga y feliz, publicación que fue traducida a más de 38 idiomas y que superó los 250.000 ejemplares vendidos, se descubre el pueblo de Okinawa donde viven la mayor población de vecinos centenarios de todo el mundo.
Un rincón, en un archipiélago del sur del país nipón, que llama la atención de curiosos y estudiosos por la cantidad de personas que viven en esta localidad y superan los 100 años. Y es que estos vecinos no solo son famosos por tener la mayor esperanza de vida de todo el planeta, sino que la mayoría de ellos gozan de un estado de salud excelente y en el que la felicidad tiene mucho que ver. Un buen ánimo que guarda mucha relación con ese propósito en la vida y esas ganas de vivir. Dicho de otro modo, con encontrar la esencia del ikigai de cada uno como ellos mismos recuerdan.