La población parece estar cada vez más concienciada de los riesgos de los contagios de enfermedades de transmisión sexual. Pese a todo, existe una extraña convicción de que si se quieren evitar riesgos es mejor confiar en el sexo oral, como si ni pasara nada.
Lo cierto es que la en buena medida las infecciones que se pueden transmitir con esta práctica son asintomáticas, pero no por ello más venéreas. Pero da la sensación de que se ignora.
Más comunes
Los médicos especializados en enfermedades de transmisión sexual (ETS) apuntan que la falta de educación sexual, sobre todo en la población joven, es la responsable principal de este desconocimiento.
Los profesionales recuerdan que con el sexo oral se está en contacto con la mucosa genital y que de ella pueden producirse varias infecciones: desde sífilis hasta gonorrea en faringe boca y labios, pasando por chancro sifilítico, herpes bucales y genitales. Del mismo modo, existe un riesgo teórico de transmisión de VIH así como uno real, aunque ínfimo de padecer cáncer de faringe si la otra persona padece el virus del papiloma humano.
Sexos
Entre los hombres que tienen relaciones con personas del mismo sexo, la gonorrea es la que se da con mayor frecuencia, especialmente en la faringe (entre el 5% y el 9%), en la uretra (6%) y el recto (5%-7%). Mientras que la clamidia se da en el recto (8%-9%) y la uretra (5%).
De la faringe a la uretra de hombres se dan un 4,8% de casos de esta enfermedad y un 4% de gonorrea, Por su parte, el 3,5% de las mujeres que tienen sexo oral con hombres padecen clamidia y un 3% gonococia.
Precauciones
Sobre las causas de estas transmisiones no tienen duda: la falta de higiene en las relaciones sexuales de este tipo. En este sentido recomiendan mantener una buena limpieza bucal así como el uso de preservativos o parches de látex como barrera.
Cualquier mucosa genital, rectal o farínge puede colonizarse por estos patógenos por lo que la más efectiva es el condón, recuerdan los médicos. Si la relación está más consolidada y se quiere retirar el profiláctico sería conveniente realizar un examen médico de ETS exhaustivo, aunque no se tengan síntomas.