Aunque cada vez hay más cabalgatas que eliminan esta práctica, aún hay muchas que maquillan de negro a sus voluntarios para encarnar al rey Baltasar y a sus pajes. Por ello, la entidad Casa Nostra Casa Vostra y el colectivo de actores y actrices negras Tinta Negra han lanzado una campaña para que hagan de ellos personas negras de verdad, como dice la propia iniciativa.
Por tradición, eran personas blancas pintadas de negro y habitualmente han exagerado y ridiculizado los rasgos faciales, haciendo por ejemplo los labios muy gruesos y rojos y dándoles un tono de piel desmesuradamente negro.
Una práctica poco inclusiva
Muchos de los voluntarios habituales escogen acompañar a Baltasar por la gracia de maquillarse y resultar irreconocibles. Una gracia que, según responsables de Casa Nostra Casa Vostra, "que un blanco se disfrace y caracterice de negro es una práctica que se conoce en el mundo anglosajón como blackface, es racista y tiene un origen colonial".
Casa Nostra Casa Vostra, en contra del maquillaje de blancos a negros / EP
Por ello, según la entidad, muchas familias catalanas con niños negros no pueden llevar a sus hijos a las cabalgatas "con lo que hay una parte de la población catalana que no tiene acceso a una fiesta popular sólo por el color de su piel".
Premiarán a los municipios que colaboren
Según los propios organizadores, el objetivo es llegar a todos los pueblos de Cataluña bajo el lema #BaltasarDeVeritat. Por ello, incluirán un mapa que registrará a todos los municipios que se hayan comprometido a prescindir de las caras embetunadas.
Se publicará en la web casanostracasavostra.cat y en las redes sociales de la entidad, y se irá actualizando a medida que se añadan municipios.
El emisario real del rey Baltasar en Fuengirola / EP
Cada vez son más
Según datos de Casa Nostra Casa Vostra, el año pasado 32 de las 43 capitales de comarca de Cataluña ya prescindieron del betún, ocho más que el año anterior. Entre ellas, las de Girona y Reus.
En ésta última, llegaron a invitar a la carroza a un grupo de personas refugiadas que llegaron a bordo del Open Arms. Otras ciudades, como Berga, ya anunciaron evitar esta práctica de cara a la próxima cabalgata.