Estos son los bosques más bonitos de todo Cataluña

Disfrutar de la pureza del aire y convivir con las diversas especies de flora y fauna es algo que solo se puede conseguir si se realiza una visita al monte. Los bosques y Parques Naturales constituyen un papel esencial en la vida del planeta ya que son considerados los pulmones de la tierra. Los incendios se presentan como una de las principales amenazas para acabar con gran parte de ellos.

Cataluña posee un considerable patrimonio en cuanto a naturaleza se refiere. La comunidad cuenta con el Alt Pirineu, uno de los Parques Naturales más grandes de toda la península. Alrededor de todo el territorio se pueden encontrar enclaves interesantes donde poder vivir la naturaleza en primera persona.

Un lugar mágico

Los bosques representan un elemento fundamental dentro de un gran número de fábulas. Constituye el típico lugar encantado, habitado por personajes tales como duendes o hadas, propios del mundo imaginario. Fageda d’en Jordá es uno de esos parajes cuyas características se acercan a las de los bosques de los cuentos.

Ubicado en la zona de Santa Pau, cuenta con un importante número de rutas para poder visitar hasta los puntos más recónditos. Dentro de Fageda d’en Jordà se puede encontrar una cooperativa (con el mismo nombre que el bosque) en la que se encargan de producir y vender una serie de productos lácteos. El bosque nace justo encima de una colada de lava correspondiente del volcán Croscat, situado a poca distancia.

En busca de la relajación

El sonido del agua al caer de la cascada o el simple canto de unos pájaros autóctonos forman parte de esos factores de la naturaleza que resultan agradables para el oído humano. Torrents de Colobrers representa el lugar idóneo para disfrutar de aquellos elementos propios del monte. La abundante vegetación que adorna a un pequeño río caracteriza a este icónico paisaje.

Es popularmente conocido también como Can Pagès, nombre del restaurante ubicado justo al inicio del camino. Torrents de Colobrers se sitúa entre la ciudad de Sabadell y Castellar del Vallés, un pequeño municipio de la provincia de Barcelona. Un paraje bastante transitado ideal para desconectar de la rutina.