Los superalimentos están a la orden del día. Estos productos han captado la atención de aquellas personas que cuidan todos los aspectos de su salud debido a su potencial nutritivo, a su alta concentración de vitaminas, antioxidantes y/o grasas saludables.

Y no paran de aparecer nuevos ejemplos. Uno de los últimos tiene como protagonista al baobab, también conocido como el árbol de la vida. Es el árbol más longevo que se conoce (se calcula que hay ejemplares de entre 800 y 1.000 años) y su fruto está llamado a ser uno de los superalimentos del año.

Luminosidad en la piel

El fruto del baobab puede ayudar a hidratar la piel para que ésta luzca radiante. “Tiene seis veces más vitamina C que una naranja, lo que lo convierte en un potente antioxidante que protege de los radicales libres”, explica Nerea Rodríguez, wellness expert del hotel Barceló Portinatx. “Se trata de un elemento clave en la producción de elastina, otra proteína que da elasticidad y tonifica la piel, tiene veinte veces más antioxidantes que el açai, y multitud de vitaminas más que ayudan a mantener la integridad celular, que favorecen la síntesis de la melanina y que estimula la circulación sanguínea”.

La experta asegura que se puede introducir el baobab en el ritual de cuidados y belleza en forma e crema, sérum o mascarilla. También como aceite, que “nutre y sana nuestra piel, le da luminosidad y, sobre todo, previene los signos de la edad y repara los daños del sol”, apunta Rodríquez. “El aceite de baobab previene las apariciones de estrías y, gracias a su poder antiinflamatorio, reduce las rojeces tras la depilación o después de una sesión intensiva de sol”, comenta.

Como mascarillo... o como alimento

El pelo también se puede beneficiar de las propiedades del baobab. Las personas que tengan un cabello seco, deshidratado y/o dañado por el uso del secador o planchas, pueden optar por utilizarlo como mascarilla capilar “porque hidrata, previene la caída, regula la producción del sebo y además aporta brillo y luminosidad”.

Aparte de como truco de belleza, el baobab también es un superalimento que se puede introducir en una dieta. Su sabor cítrico puede echar para atrás a algunas personas, en este caso la experta recomienda tomarlo en cápsulas. Otras opciones son “espolvorearlo en tus boles de frutas con yogur y semillas, en ensaladas, disolverlo en sopas o bebidas calientes o incorporarlo a tus smoothies”.