En 2020 zarpará el primer crucero del mundo para los defensores de que la Tierra es plana

La Conferencia Internacional de la Tierra Plana (FEIC, por sus siglas en inglés) ha programado un viaje en crucero para el año 2020 con el objetivo de llegar hasta el muro de hielo que protege a la Tierra, una teoría que defienden los creyentes de que el globo terráqueo no es realidad esférico, sino que se trata de una superficie plana tal y como se creía hace miles de años.

El auge del movimiento terraplanista se fundamenta principalmente en pasajes bíblicos y sostiene que nuestro mundo es en realidad un disco plano protegido por un gran muro de hielo situado en la Antártida que evita, entre otras cosas, que podamos caer al vacío o que se derrame el agua procedente de los océanos. Sin embargo, la propia ciencia alrededor de la navegación demuestra que este principio es imposible, tal y como ha explicado el excapitán de barco Henk Keijer: “Los barcos navegan basándose en el principio de que la Tierra es redonda. Las cartas náuticas se diseñan con eso en mente: que la Tierra es redonda”.

“La aventura más grande, más audaz y mejor hasta la fecha”

A pesar del rechazo hacia una hipótesis tan disparatada, los devotos terraplanistas han anunciado en su web que esta aventura será “la más grande, más audaz y mejor hasta la fecha”, convirtiéndose así en su proyecto más ambicioso, título que hasta ahora tenía el lanzamiento del primer cohete terraplanista.

Los organizadores de esta expedición son los mismos que organizan la Conferencia Internacional FEIC y además cuentan con el apoyo de algunas personalidades como es el caso de raperos como B.o.B o la concursante de realities Tila Tequila. Todos ellos defienden que las agencias espaciales del mundo han conspirado a lo largo de la historia para esconder a la humanidad la verdadera condición de la Tierra: “Esto probablemente empezó durante la Guerra Fría. La URSS y los Estados Unidos estaban obsesionados con ser los mejores en cuanto a llegar al espacio se refiere, hasta el punto de que cada uno fingía sus logros en un intento por seguir el ritmo de los supuestos logros del rival”, han comentado los organizadores.