Un hombre estuvo a punto de morir por culpa de morderse las uñas

Luke Hanoman, británico de 28 años, estuvo al borde de la muerte, después de que su costumbre de comerse las uñas se tradujera en una infección con graves consecuencias. 

Según el diario británico Mirror, el hombre, que se mordía las uñas constantemente a causa de los nervios, se sintió mal el pasado mes de julio después de comerse la piel situada alrededor de las uñas. A continuación Hanoman empezó a tener los síntomas parecidos a los de una gripe o algo peor: temperaturas altas, pulso acelerado, sudores fríos y temblores. 

Contrajo la sepsis

El hombre siguió trabajando con estos síntomas hasta que su madre lo llevó al hospital, donde le comunicaron que sufría la sepsis. Esta enfermedad, también conocida como envenenamiento de la sangre, es una complicación que se desarrolla ante una infección grave y que puede conducir a la muerte si no se trata a tiempo. 

El joven permaneció 4 días en el hospital bajo observación y los médicos lograron salvar su vida. El propio joven explicó "tuvo suerte" de salir con vida, ya que, según la organización The UK Sepsis Trust, unas 44.000 personas mueren de sepsis cada año en el Reino Unido.