Gilead, el fabricante de remdesivir, el primer antiviral aprobado para su uso temporal en 50 países de todo el mundo para el tratamiento del coronavirus, ha realizado un estudio sobre la información genética disponible de ómicron. Tras ello, no ha encontrado mutaciones adicionales. Esta situación supone una buena noticia para la comunidad internacional, dado que indica que este antiviral seguirá siendo activo en el tratamiento contra esta variante, además de contra la Alfa, Beta, Gamma, Delta y Épsilon.
Cabe destacar que ómicron, detectada en Sudáfrica el mes pasado, es ahora uno de los principales quebraderos de cabeza para los científicos y las autoridades sanitarias, dado que es muy contagiosa. De hecho, se empieza a poner en duda la efectividad total de las vacunas contra esta variante.
Destensar el sistema sanitario
El remdesivir se ha mostrado como el medicamento antiviral adecuada para tratar a los hospitalizados debido al Covid-19. Este fármaco contribuye a frenar la enfermedad y acelerar la recuperación de los ingresados.
Los beneficios médicos que ofrece se derivan en que de esta forma el tiempo de hospitalización se reduce, con la consiguiente disminución del estrés en los sanitarios. Por otra parte, también permite disminuir el impacto económico que supone tener ingresadas de golpe a tantas personas debido a una patología como es el Covid-19.